El estrés laboral es una realidad que afecta a miles de personas en el día a día. Muchas veces las señales pueden pasar desapercibidas pudiendo afectar nuestra salud tanto física como mental.
Por ello, reconocer los síntomas de estrés laboral es importante para tomar medidas a tiempo y así evitar que afecte a tu calidad de vida. A continuación te ayudamos a identificar síntomas y señales de estrés para poder prevenirlos.
El estrés laboral es una respuesta del cuerpo, tanto física como emocional, que ocurre cuando las exigencias de nuestro trabajo, por la presión y desgaste, superan nuestra capacidad para hacerlas frente.
Según la SEAS (Sociedad Española para el Estudio de la Ansiedad y el Estrés) el estrés laboral puede definirse como “un conjunto de respuestas cognitivas, fisiológicas y emocionales que se producen ante aspectos adversos como el contenido, la organización o el ambiente de trabajo”.
Las causas más comunes de estrés laboral incluyen una sobrecarga de trabajo, falta de control en las tareas, ambiente hostil y falta de apoyo psico-social en el trabajo. Algunos otros factores que pueden contribuir al desarrollo de estrés son largas jornadas, presión constante por cumplir objetivos y falta de reconocimiento.
El estrés laboral puede repercutir en nuestra salud con problemas que afectan a nuestra salud mental como la ansiedad y la depresión, así como con problemas físicos. Entre los problemas más comunes encontramos:
Así mismo, el estrés laboral a largo plazo puede producir enfermedades cardiovasculares y puede debilitar el sistema inmunológico, haciéndonos más propensos a contraer infecciones.
El estrés laboral puede manifestarse con diversos síntomas, tanto físicos como emocionales. Las primeras manifestaciones fácilmente serán emocionales, estas se van intensificando con el tiempo afectando nuestro comportamiento y salud física.
Reconocer los síntomas del estrés es esencial para tomar medidas preventivas, los cuales en un principio pueden ser insignificantes pero con el paso del tiempo pueden indicarnos que algo no está bien. Entre los síntomas podemos destacar:
Estos síntomas a menudo son los primeros en aparecer, entre ellos podemos reconocer:
Si notas que te superan las tareas diarias y te sientes incapaz de abordarlas, si tienes dificultad para concentrarte y falta de motivación, seguramente debas plantearte si el origen es el trabajo, porque estarás pasando por alguna fase del estrés laboral. Los síntomas emocionales de estrés laboral pueden llevar a una menor productividad y una disminución en la capacidad para tomar decisiones.
El estrés acumulado también se ve reflejado en el cuerpo, entre los síntomas físicos más comunes podemos destacar:
El estrés también puede alterar el comportamiento y nuestro carácter, ya que una persona estresada puede volverse más retraída o irritable, pudiendo afectar en sus relaciones, tanto laborales como familiares. También pueden producirse cambios en los hábitos como mayor consumo de alcohol o tabaco, el descuido de la actividad física o adoptar hábitos alimenticios poco saludables.
En algunos casos puede verse disminuido el rendimiento laboral, aumentando más el estrés y produciéndose un círculo vicioso.
Para manejar y prevenir el estrés laboral, hace falta implementar cambios que nos ayuden a mantener un equilibrio, identificando qué aspectos laborales son los que nos producen mayor estrés y encontrar la forma de mitigarlos.
Estos aspectos pueden incluir la adopción de prácticas de autocuidado, la búsqueda de apoyo profesional o la reestructuración de las responsabilidades laborales.
Estas técnicas son efectivas tanto para reducir el estrés como para prevenirlo. Practicar regularmente la meditación, la respiración profunda o el yoga pueden ayudar a calmar la mente así como a relajar el cuerpo, reduciendo significativamente los niveles de estrés.
El mindfulness es una técnica que se centra específicamente en vivir el momento presente, aceptando las cosas tal como son; esto puede ser muy útil en un entorno laboral estresante. Aquí tienes 5 Apps para iniciarte en la meditación en casa.
Para prevenir el estrés laboral es esencial mantener un equilibrio entre el trabajo y la vida personal. Para esto, es indispensable mantener un límite claro entre el tiempo de trabajo y el tiempo personal, dedicando tiempo a actividades que disfrutemos y que nos permitan desconectar del trabajo.
Es fundamental e innegociable encontrar tiempo para el descanso, para el ejercicio y para las relaciones personales, si no se atienden estas áreas tu equilibrio se va a tambalear. Así mismo, es importante aprender a delegar tareas y a decir que no cuando sea necesario.
Si el estrés ha llegado a una situación peligrosa para tu salud, plantearte muy seriamente encontrar apoyo profesional. La terapia psicológica puede ser muy efectiva para ayudar a desarrollar habilidades que te permitan manejar el estrés.
En algunas ocasiones, desde la empresa se promueven programas de bienestar laboral que ofrecen recursos y apoyo para gestionar el estrés en el trabajo.
En el lugar de trabajo puede ser útil hablar con un supervisor o con la persona encargada de recursos humanos sobre el estrés, esto puede ayudar a ajustar la carga de trabajo o flexibilizar el mismo.
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