Para entender qué son las bases de cotización y cómo calcularlas en primer lugar diferenciaremos a los trabajadores en dos grupos:
Las bases de cotización son las remuneraciones mensuales brutas, incluyendo el prorrateo de las pagas extras en lo que se refiere a los trabajadores por cuenta ajena. En cuanto a los trabajadores por cuenta propia la base de cotización depende de la cantidad que paguen cada mes, son ellos mismos los que asignan su base de cotización, ya que sus ingresos dependen de una facturación y no de unos salarios.
Las bases de cotización sirven para hacer frente a las contingencias de los trabajadores, en este caso no hay que distinguir a los trabajadores por cuenta ajena o propia, ya que todos tienen derecho a percibir remuneraciones por las siguientes contingencias:
Eso sí, la cuantía a percibir por cada trabajador es diferente y depende de las bases de
cotización
Las bases de cotización son aprobadas en los presupuestos generales del estado que marcan unos mínimos y máximos de cotización.
En el caso de los trabajadores por cuenta ajena depende del salario percibido que tiene que estar comprendido entre el mínimo de 1.108,33€/mes al máximo que es de 4.070,10€/mes
En cuanto a los trabajadores por cuenta propia son los propios trabajadores los que calculan su base, que tiene que estar comprendida entre el mínimo de 944,50€/mes al máximo de 4.070,10€/mes ( siempre que tengas menos de 47 años, si se tuviera más de 47 años la base máxima de cotización es de 2.077, 80€/mes ), según el importe de base de cotización que elijan pagarán una cuota que será el 30,3 % de dicha base.
Las bases de cotización son para hacer frente a las contingencias que nos puedan ocurrir durante nuestra vida laboral y en el momento de nuestra jubilación.
Los trabajadores por cuenta ajena, su base de cotización depende de los salarios percibidos y no puedes ni ampliarla, ni rebajarla, según lo que coticen por sus salarios tendrán las retribuciones que le correspondan.
En el caso de los trabajadores por cuenta propia, sí pueden escoger la cantidad a percibir, ya que según la base de cotización que elijan pagarán una cuota y esta cantidad la decide el propio trabajador según los siguientes límites:
Es decir, el autónomo sin que dependa de los ingresos obtenidos por su actividad profesional puede elegir su base de cotización.