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Flora intestinal dañada

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Seguro has oído hablar de la flora intestinal en algún momento, lo que quizás no sabes es la importancia de tenerla en condiciones para gozar de una óptima salud digestiva y general. Es por eso que hoy queremos hablarte sobre las causas y consecuencias de tener una flora intestinal dañada y de cómo podemos hacer para recuperarla. ¡Sigue leyendo!

¿Qué es la flora intestinal? 

En nuestro organismo viven un conjunto de bacterias o microorganismos vivos que colaboran en la digestión de los alimentos, a estos microorganismos se los conoce como flora intestinal o microbiota intestinal

Estas baterías, en su gran mayoría, son beneficiosas para nuestro sistema digestivo. Nuestra microflora está compuesta por 100 billones de bacterias aproximadamente y más del 90% se encuentran en el colon. 

Las bacterias de la flora intestinal cumple funciones importantes en nuestro organismo, como por ejemplo: 

  • Facilitan la absorción de minerales como el calcio y el hierro y la síntesis de ciertas vitaminas como la K y del grupo B. 
  • Favorecen el movimiento intestinal. 
  • Impiden que bacterias patógenas puedan producir infecciones. 
  • Fortalecen el sistema inmunitario, aumentando las defensas naturales. 

¿Por qué se puede dañar la flora intestinal? 

 Existen diferentes factores que pueden alterar la microflora, muchos de estos son controlables, y podrás evitar una flora intestinal dañada. Es por ello importante que podamos detectarlos y cuidar estas bacterias beneficiosas para nuestro organismo. 

Entre los factores que encontramos son: 

  • Alimentación poco saludable: el exceso en la dieta de grasas saturadas, de alimentos procesados, la alimentación pobre en fibras puede afectar de forma negativa a la flora intestinal. 
  • Los malos hábitos de vida como el sedentarismo, el consumo de alcohol o tabaco. 
  • El estrés, el insomnio, la exposición a la contaminación o radiación solar. 
  • La edad, el envejecimiento es un factor de riesgo ya que con la edad va disminuyendo el número de bacterias beneficiosas. 
  • El consumo de antibióticos, muy necesarios para tratar infecciones, altera el equilibrio de la flora. 

Todos estos factores pueden alterar el equilibrio normal de la flora intestinal haciéndonos más propensos a sufrir infecciones, alergias, problemas digestivos como diarrea o estreñimiento, entre otros. 

Síntomas de una flora intestinal dañada 

Cuándo algo no funciona correctamente, nuestro cuerpo nos lo hace saber a través de ciertos síntomas, cuando hablamos de la flora intestinal dañada, estas señales que nos da el cuerpo pueden ser: 

  • Episodios de estreñimiento o diarrea frecuente. 
  • Hinchazón abdominal o exceso de gases. 
  • Heces con olor desagradable. 
  • Dolor o cólicos abdominales.
  • Disminución de las defensas. 

Así mismo, tener una flora intestinal dañada puede generar cambios de humor, cansancio físico constante, insomnio, etc. 

Recuperando tu flora intestinal

Cuando logras tratar el factor desencadenante de tu flora intestinal dañada, esta se recupera rápidamente; sin embargo, podemos ayudar a que esta microbiota se recupere, esto es posible siguiendo pautas alimentarias saludables. 

  • Aumenta el consumo de probióticos, son de ayuda para recuperar la flora intestinal y podemos encontrarlos en alimentos fermentados como yogures, kéfir, leches fermentadas, etc. 
  • Lleva a cabo una alimentación que contenga todos los grupos de alimentos e incluya frutas, verduras, legumbres y frutos secos, además de evitar el consumo de alimentos procesados y azucarados. 
  • Aumenta el consumo de fibra dietética, ya que contribuye a equilibrar la flora intestinal. 
  • Bebe agua en las cantidades recomendadas, entre 1 ½ y 2 litros al día dependiendo de la actividad física y el clima en el que te encuentres. 
  • Además, es importante que realices todos los días actividad física y que descanses adecuadamente. 

No obstante, si tienes dudas, siempre es recomendable acudir al profesional de salud cuando algo no funciona correctamente y tenemos síntomas de una flora intestinal dañada. 

Como has podido leer a lo largo del artículo, nuestros hábitos de vida influyen en nuestra salud digestiva. Tener una flora intestinal dañada puede traer, además de molestias digestivas, cambios en el estado de ánimo o hasta incluso estrés y ansiedad. Es por ello fundamental recuperar la flora para gozar de una buena salud digestiva.

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