Salud
embarazo silencioso

Embarazo silencioso: qué es y qué síntomas tiene

Índice de contenidos

Los síntomas de un embarazo pueden variar de una mujer a otra, pero entre los signos más comunes se observan un retraso en la menstruación, náuseas, calambres, hinchazón y fatiga, entre otros. Sin embargo, algunas veces un embarazo puede pasar desapercibido hasta que llega el parto. Estos son los llamados embarazos silenciosos y, aunque ocurren en casos excepcionales, algunas mujeres viven embarazos sin darse cuenta.

Sigue leyendo el artículo para saber cómo surgen los embarazos silenciosos y qué consecuencias tienen.

¿Qué es un embarazo silencioso? 

Un embarazo silencioso es aquel en que la mujer no se da cuenta de que está embarazada hasta bien avanzada la gestación o, incluso, hasta el momento del parto. Además de pasar desapercibido para la mujer que lo vive, también lo hace para el entorno.

Aunque las causas de un embarazo silencioso no están del todo claras, se cree que pueden estar motivadas tanto por factores psicológicos como físicos.

Las causas psicológicas que suelen derivar en un embarazo silencioso son el miedo a la gestación, a la maternidad o a las repercusiones que puedan surgir de un embarazo. En estos casos, las mujeres niegan, como mecanismo de defensa, el hecho de estar embarazadas. 

En cuanto a los factores físicos, tenemos:

  • Mujeres con menstruaciones irregulares que no relacionan la falta de menstruación con el embarazo.
  • Alteraciones del ciclo menstrual en mujeres con obesidad y sobrepeso, que dada esta circunstancia, son incapaces de detectar los movimientos del bebé y el volumen extra hasta que el embarazo está avanzado. 
  • Sangrados durante el embarazo que se perciben como la menstruación. La mujer cree que tiene la regla y no relaciona estas pérdidas como síntoma principal del embarazo.

¿Cómo pasa desapercibido un embarazo silencioso?

El embarazo silencioso ocurre porque los signos típicos del embarazo pasan desapercibidos al ser atribuidos a otras circunstancias. 

Algunos ejemplos de síntomas propios del embarazo que pasan desprevenidos son:

  • El aumento de peso derivado del embarazo puede llegar a atribuirse a haber cogido unos cuantos kilos debidos a una mala alimentación o a causa de situaciones de estrés. 
  • La ausencia de sangrado puede interpretarse como una menstruación irregular.
  • Los movimientos típicos del feto se perciben como movimientos intestinales. 
  • En ocasiones, ya sea por la complexión física o la colocación del feto, pueden no observarse los cambios físicos característicos del embarazo, como el abdomen abultado y el volumen de la barriga. 

Consecuencias de un embarazo silencioso

No saber que estás embarazada tiene diferentes riesgos, tanto para tu salud como madre como para la del bebé.

La principal consecuencia de no tener conocimiento del embarazo es no tomar las precauciones nutricionales oportunas, como puede ser la eliminación de algunos alimentos y hábitos.

Cuando estás embarazada, debes evitar el consumo de alcohol, de cafeína, de pescados con altos niveles de mercurio y alimentos que puedan transmitir enfermedades como fiambres, leche o quesos blandos sin pasteurizar, y huevos crudos. Al estar gestando un embarazo silencioso, no se evita el consumo de estos alimentos, pudiendo llegar a dañar el sistema nervioso o el cerebro del bebé o bien, transmitirle enfermedades.

Además, cuando estás embarazada, debes acudir de manera periódica al ginecólogo para detectar cualquier anomalía, problema o enfermedad. El ginecólogo debe realizar todas las revisiones oportunas, como controles analíticos y ecografías, para saber que el embarazo se desarrolla sin irregularidades. Cuando surge un embarazo silencioso, estos controles necesarios no son llevados a cabo y el embarazo se desarrolla sin saber cómo se va desenvolviendo el bebé. 

Además, será el médico quien determinará qué suplementos debes tomar durante el embarazo para que el bebé crezca correctamente. 

Algunos de los suplementos que pueden aconsejarte durante el embarazo son:

  • El hierro, necesario para el crecimiento y desarrollo cerebral del bebé. Cuando estás embarazada, aumenta la cantidad de sangre del cuerpo, por lo que será necesario aumentar los niveles de hierro.
  • La vitamina D, ayuda al calcio a formar correctamente los huesos del bebé. 
  • El ácido fólico, necesario para evitar problemas congénitos y defectos del cerebro del feto.
  • El calcio, necesario en el transcurso de la gestación para evitar la presión alta durante el embarazo (preeclampsia), además de la correcta formación de huesos y futuros dientes de la criatura.

Este tipo de embarazo suele confundirse con otros patologías como el síndrome de ovario poliquístico o la perimenopausia, y sólo se determinará que existe un embarazo silencioso cuando la persona acude al médico por cualquier otra dolencia. Así que te recomendamos que, ante cualquier duda o situación fuera de lo normal, acudas a un profesional de la salud para conocer la causa de esos síntomas y descubrir si se trata de un embarazo silencioso o no.

Escribe un comentario