Las bacterias del yogur aportan beneficios a nuestra salud, más concretamente a la flora intestinal donde viven millones de bacterias esenciales para el correcto funcionamiento del organismo. La cantidad de bacterias que puede contener un yogur oscila entre 100 millones y 10.000 millones por cada envase. En este artículo profundizamos en este asunto y te contamos cuáles son las bacterias del yogur, qué beneficios aportan y qué hay que tener en cuenta sobre ellas.
Antes de empezar a analizar las bacterias del yogur, es importante tener en cuenta el papel que juegan las bacterias, en general, en nuestro organismo.
El aparato digestivo está poblado de un gran número de bacterias. A este conjunto de bacterias se le denomina microbiota y tiene funciones tan relevantes como la de absorber los nutrientes de los alimentos o proteger a los intestinos de otras bacterias dañinas.
Esta microbiota se puede ver dañada por diferentes motivos:
En algunos casos, las bacterias del yogur, pueden ayudar a repoblar las familias de bacterias del sistema digestivo.
En un yogur es posible encontrarse varios tipos de bacterias distintas y cada una tiene su función. Las bacterias del yogur más comunes son:
Aunque en un supermercado puedas encontrar bífidus en la zona de yogures, en realidad, no se les considera yogur, sino leche fermentada. Por eso en las etiquetas de los bífidus no encontrarás especificado el nombre yogur. Veamos en detalle:
Pero, además de esta diferenciación, también hay otros productos fermentados de la leche muy similares a los yogures que están catalogados como pasteurizados después de la fermentación. A estos productos se les ha aplicado un tratamiento térmico para que puedan aguantar más tiempo, pero las bacterias de las que hablamos no aguantan estas temperaturas y no sobreviven al proceso.
En conclusión, la diferencia entre bífidus y yogur son las bacterias presentes en el alimento.
Las bacterias del yogur aportan beneficios a nuestro organismo. Tanto las del yogur como las de los bífidus ayudan a que la microbiota intestinal se vea reforzada. Consumirlos aporta estos beneficios, entre otros:
A nivel dietético, el yogur y algunos productos lácteos como las leches fermentadas, son interesantes a nivel nutricional. A la hora de tomar yogur, se recomienda hacerlo con frutas por su efecto probiótico: es una buena combinación para empezar tu día.
Una microbiota saludable se consigue gracias a un equilibrio de las bacterias. Como decíamos al principio del artículo, cuando hay episodios de estrés, una alimentación poco equilibrada o un exceso de medicamentos, la microbiota se ve alterada. Pero también puede verse afectada por un exceso de ciertas bacterias. Las bacterias del yogur son saludables, siempre y cuando haya un equilibrio en las demás bacterias. Este equilibrio se consigue con una dieta variada, añadiendo más alimentos como frutas, verduras o legumbres y eliminando o disminuyendo carnes o alimentos ultraprocesados.
Así pues, las bacterias del yogur son fundamentales para el proceso por el cual la leche pasa a ser un yogur. Dependiendo de las bacterias que participan en el proceso, el yogur adquiere distintas texturas o sabores. Pero además, estas bacterias pueden ayudar a tu organismo en diferentes funciones, principalmente si mantienes una dieta equilibrada.