Las personas que no pueden asistir a un centro sanitario por problemas de salud o movilidad son numerosas, independientemente de su edad. La atención médica domiciliaria es la mejor alternativa para ofrecer el apoyo que necesitan. Te contamos todo sobre ella, desde qué es hasta cuáles son sus principales ventajas.
La atención médica domiciliaria es un tipo de asistencia prestada directamente en el domicilio de los pacientes que, debido a un problema de movilidad o por su estado de salud, no pueden desplazarse a un centro sanitario.
Esta es proporcionada por profesionales médicos autorizados, desde enfermeros, terapeutas, doctores o ayudantes que tienen el objetivo de tratar o controlar una enfermedad, lesión o cualquier afección médica. La asistencia puede ir desde una cura de heridas, sacar sangre para un análisis o hasta tratamientos complejos como la quimioterapia.
Se trata de un servicio que no está diseñado exclusivamente para los ancianos que precisan cuidados médicos, sino que también son usuarios las personas dependientes y discapacitadas.
Es habitual la confusión entre los términos de atención médica domiciliaria y atención domiciliaria. Aunque por su nombre tan parecido y porque ambos se llevan a cabo en la residencia del paciente, pudiera pensarse que es lo mismo, en realidad tienen grandes diferencias.
La principal diferencia es que la atención médica domiciliaria es administrada por profesionales médicos cualificados, mientras que el segundo término es prestado por personas no vinculadas con el sector sanitario.
Además, la asistencia médica en casa cubre todo tipo de tratamientos para cualquier enfermedad o dolencia. Sin embargo, la atención domiciliaria consiste en realizar tareas para atender las necesidades de la vida cotidiana del paciente, como tareas domésticas de limpieza, hacer la compra, cocinar o la atención personal, como asear o acostar a la persona.
La atención médica en el hogar tiene un papel esencial en el sector de la salud y no tiene ninguna carencia con respecto al trato que recibe el paciente en un hospital.
Todos los servicios médicos son proporcionados por especialistas cualificados en todas las especialidades, desde médicos, enfermeros, psicólogos o hasta fisioterapeutas. Por ello, los pacientes tienen el mismo acceso y oportunidades de recibir una asistencia médica que aquellos que acuden a un hospital.
Otra de las ventajas es la comodidad que aporta al enfermo y a los familiares. Evita los desplazamientos al centro sanitario, nada fácil al estar haciendo frente a determinadas enfermedades, así como las pesadas noches en la habitación del hospital.
Y eso no es todo. La intimidad es mucho mayor, algo muy valorado, especialmente en las enfermedades más duras. En definitiva, aporta un beneficio físico y mental a las personas que padecen una afección crónica o una discapacidad severa.
Como ves, la atención médica domiciliaria es una solución adecuada para determinados casos. Si tienes un problema de salud o de movilidad que te impiden ir a tu centro sanitario o cuidas de un familiar que necesita asistencia en casa, el Seguro de Salud bienestar senior de Occident ofrece un servicio integral para que recibas la ayuda profesional que necesitas. En casa, como en ningún sitio.