- Cada uno de estos tipos de urticaria obedece a diferentes causas y provoca síntomas muy distintos. Para conocer el tratamiento es fundamentar saber de qué tipos se trata.
- En ocasiones, la urticaria se confunde con el angioedema, que puede producirse de forma simultánea.
- Recuerda que el autodiagnóstico nunca es buena idea: si crees que padeces algún tipo de urticaria, asegúrate de acudir a un dermatólogo para recibir asesoramiento médico especializado.
La urticaria es una de las enfermedades dermatológicas más habituales. Reacciones alérgicas, el sol o el frío son algunas de las causas más habituales aunque también es cada vez más habitual la urticaria por estrés.
Cada uno de estos tipos de urticaria obedece a diferentes causas y provoca síntomas muy distintos. Para averiguar el tratamiento más adecuado, es fundamental identificar el tipo de urticaria al que corresponde tu caso.
En este post analizamos los síntomas más comunes y los tratamientos adecuados para cada uno de ellos. Recuerda que el autodiagnóstico nunca es buena idea: si crees que padeces algún tipo de urticaria, asegúrate de acudir a un dermatólogo para recibir asesoramiento especializado. Puedes hacer uso de la garantía Bienestar y Salud del seguro de decesos de Occident y acudir a un especialista privado a precio reducido.
Tipos de urticarias
El término “urticaria” engloba un amplio catálogo de patologías de la piel que comparten la presencia de erupciones cutáneas en toda la superficie de la epidermis, conocidas como “ronchas” o “habones”. Los habones se producen por la segregación de histamina, que provoca un picor intenso y que puede tener su origen en múltiples causas de la urticaria.
En función de la causa y los síntomas que genere, la urticaria se clasifica en dos grandes tipos: la urticaria aguda y la crónica, que se distinguen por la duración de los síntomas. Dentro del segundo grupo, también encontramos la crónica espontánea, la inducible y la llamada urticaria vasculitis, mucho menos frecuente.
Existen varios tipos de urticaria, que se clasificarán según las causas y síntomas que la generan.
En ocasiones, la urticaria se confunde con el angioedema, que puede producirse de forma simultánea. El angioedema consiste en una reacción cutánea en las capas más profundas de la piel, que provoca una hinchazón. Si sufres una reacción de este tipo, es importante que no lo confundas con la urticaria y consultes con tu médico para determinar la causa y el tratamiento adecuado.
Urticaria aguda
La urticaria aguda es una erupción cutánea acompañada de picor intenso que acostumbra a durar menos de seis semanas. Los brotes de urticaria aguda son muy frecuentes: alrededor de un 20% de la población sufre uno alguna vez en la vida.
Aunque a menudo la urticaria aguda se asocia a una reacción alérgica, ésta no suele ser la causa detrás del brote: las reacciones alérgicas suelen tener consecuencias más graves y se producen siempre de la misma forma después de entrar en contacto con el alérgeno. Lamentablemente, muchas veces es difícil averiguar a qué se debe un brote agudo de urticaria, aunque entre la población infantil es habitual que se relacione con una infección.
Urticaria crónica espontánea
La urticaria crónica espontánea se caracteriza por la aparición diaria de ronchas en el cuerpo, a menudo acompañadas de hinchazón, durante más de seis semanas. Es extremadamente molesta para quien la sufre y afecta a la calidad de vida: al no encontrar causa o tratamiento adecuado puede llegar a generar mucha angustia en el paciente.
Aunque no se ha descubierto la causa de esta afección, los especialistas han demostrado que en muchas ocasiones se debe a una respuesta autoinmune por parte del cuerpo. Ello significa que no hay una patología detrás de las reacciones, sino que las moléculas segregan histamina de manera espontánea.
Afortunadamente, este tipo de urticaria también suele cesar de forma espontánea. En la mayoría de los casos, los síntomas desaparecen en menos de un año, y no tienen consecuencias negativas en el organismo a largo plazo.
Urticaria inducible
Como su nombre indica, la urticaria inducible se produce a raíz del contacto con un estímulo concreto en la piel. El brote de urticaria dura entre 1 y 2 horas, y siempre tiene un agente causal: el frío, el sol, o el agua, como en el caso de los picores después de la ducha del prurito acuagénico. Es un tipo de urticaria crónica, y al ser poco frecuente se suele confundir con otras patologías dermatológicas.
Según la causa detrás de la urticaria inducible, existen varios subtipos entre los cuales destacan:
- Dermografismo: Es el tipo más común de urticaria inducible, que aparece después de rascar la piel. Sus efectos cesan después de media hora o menos. La enfermedad suele desaparecer al cabo de entre uno y tres años, aunque en algunos casos dura toda la vida pero con síntomas más atenuados.
- Urticaria por frío: En este caso, el habón aparece tras el contacto con las bajas temperaturas. Los pacientes que sufren este tipo de urticaria deben tener cuidado con los cambios drásticos de temperatura para evitar una reacción general, así como con el consumo de bebidas frías que puedan causar una reacción en la glotis.Por suerte, en la mayoría de casos la urticaria por frío suele remitir al cabo de cinco años o menos. Cabe señalar que también existe la urticaria opuesta, provocada por el contacto con objetos a altas temperaturas, conocida como urticaria colinérgica.
- Urticaria al sol: esta reacción tiene lugar cinco minutos después de exponerse a la luz del sol, y desaparece entre tres y cuatro horas después. No hay que confundirla con las quemaduras del sol.
Urticaria vasculitis
La urticaria vasculitis se distingue de los otros tipos de urticaria porque no produce picor, sino dolor. En ocasiones van acompañados de una sensación de calor, fiebre y malestar general.
La urticaria vasculitis tiende a producirse más frecuentemente en las mujeres, y alrededor de los cuarenta años de edad. Por suerte, las reacciones de este tipo de urticaria no suelen durar más de 3 días.
¿Sabes cuál es el tratamiento para la urticaria que hay que seguir?
Como es natural, cada uno de los tipos de urticaria responde a tratamientos distintos, en función de la causa que lo provoca. A continuación mostramos el tratamiento más habitual de cada uno de ellos, pero recuerda, siempre debe estar indicado por un profesional médico:
- Urticaria aguda: Un episodio agudo de urticaria se suele tratar con antihistamínicos, y solo en los casos más graves se utilizan corticoides. Es necesario seguir tomando los antihistamínicos durante varios días para evitar que los habones reaparezcan, y someterse a revisión médica para evaluar la evolución del episodio.
- Urticaria crónica: Los antihistamínicos son el tratamiento más habitual para la urticaria crónica espontánea, aunque solo alivian los síntomas y no curan la causa subyacente a la enfermedad. Es importante recordar que, en la mayoría de los casos, la urticaria crónica no supone un peligro grave para la salud, y suele remitir por sí sola después de unos años. Por esa razón, no hay que angustiarse si reaparecen los síntomas después de un episodio concreto.
- Urticarias inducibles: La mayoría de urticarias inducibles responden a los antihistamínicos, aunque la urticaria por presión de objetos (al llevar un bolso colgado del hombro, por ejemplo) requieren de uso de corticoides.
- Urticaria vasculitis: Este tipo de urticaria no responde al uso de antihistamínicos. Suele requerir una biopsia y una analítica amplia para tratar el problema detrás de la reacción. Es esencial ponerse en manos de un especialista que determine el tratamiento más adecuado.
No te autodiagnostiques, consulta a un profesional
Como puede apreciarse, hay muchísimos tipos de urticaria, por lo que es importante no precipitarse con un autodiagnóstico. Muchos pacientes de urticaria inician un tratamiento por su cuenta que puede llegar a empeorar las cosas. Por ello, es imprescindible que cuentes con la ayuda de un experto en dermatología.
Si sufres de algún tipo de urticaria, recuerda que el servicio de Bienestar y Salud de Occident ofrece asistencia dermatológica especializada. Si dejas tu caso en manos de profesionales, ellos te ofrecerán un diagnóstico fiable y un tratamiento seguro, teniendo en cuenta tu cuadro médico.
Reduce tu estrés por la urticaria
Uno de los mayores problemas de la urticaria es la angustia que provoca la ausencia de causas aparentes. A menudo, esta preocupación se vuelve tan grave que la gente que padece urticaria espontánea cree que en realidad sufre urticaria por estrés.
No olvides que solo un especialista puede determinar los motivos de tu enfermedad, y que en la mayoría de los casos las patologías de la piel son tratables. Por ello, es importante que intentes relajarte y gestionar tu estrés consumiendo melatonina o haciendo ejercicio frecuente. Para todo lo demás, ponte a disposición de un médico especializado para que te asesore sobre el tratamiento más adecuado para tu problema de urticaria.