Tensión ocular por estrés: síntomas y cómo tratarla

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sintomas y tratamiento de la tension ocular por estres
La tensión ocular alta es un fenómeno habitual con el paso de los años. Aunque en muchas ocasiones se debe al proceso natural del envejecimiento, también puede deberse a otras patologías. De hecho, uno de los tipos más frecuentes de hipertensión ocular es la tensión ocular por estrés.

Afortunadamente, este tipo de hipertensión ocular admite tratamiento, pero es importante saber cómo identificarla para encontrar la solución más adecuada. En este post te indicamos los síntomas principales de la tensión ocular por estrés y las diferentes formas de tratamiento para aliviarla.

Tensión ocular normal vs tensión ocular alta

Para entender en qué consiste la hipertensión ocular, es útil saber cómo funciona el ojo humano: dentro del globo ocular, el humor vítreo y el humor acuoso ejercen presión sobre las partes duras del ojo. Ello permite que veamos correctamente pero, si no existe un equilibrio entre la producción y el drenaje de estos líquidos, el aumento de la presión puede dañar el nervio óptico y provocar glaucoma. Cualquiera puede sufrir tensión ocular alta, aunque el problema es más común entre personas mayores de sesenta años, diabéticas o aquejadas de miopía o hipermetropía elevada.

En general, se considera que la tensión ocular es normal cuando se encuentra entre los 12 y los 21 mm Hg. En cuanto a la hipertensión ocular, se considera que se entra en riesgo de glaucoma cuando la presión supera los 22 mm Hg. A pesar de ello, estos valores pueden variar en función de la persona, por lo que es importante someterse a un examen médico para determinar si padecemos hipertensión ocular.

Síntomas de la hipertensión ocular por estrés

Los principales síntomas de la presión ocular alta por estrés son los mismos que en cualquier otro caso de hipertensión ocular. Es importante señalar que, a menudo, el paciente solo logra percibirlos en un estadio avanzado, cuando van acompañados de problemas más serios. Precisamente por ese motivo, es fundamental detectarlos cuanto antes mediante una revisión periódica con un oftalmólogo profesional.

Entre los síntomas más habituales de la tensión ocular alta se encuentran:

  • Dolor de ojos y cefalea (dolor de cabeza)
  • Visión borrosa o pérdida de visión de forma gradual
  • Enrojecimiento ocular
  • Náuseas derivadas del dolor ocular

La clave para detectar si los anteriores síntomas de hipertensión ocular se deben al estrés está en detectar signos de estrés que estén afectando a nuestra visión. Algunas de las manifestaciones más comunes de hipertensión ocular por estrés son la sequedad en los ojos, los espasmos en los párpados, el dolor de cabeza, la sensibilidad a la luz y la fatiga visual.

Afortunadamente, cuando la hipertensión ocular se debe al estrés, a menudo podemos reducir sus síntomas lidiando con el estrés subyacente a nuestro problema oftalmológico. Algunas de las formas de tratar la tensión ocular alta por estrés son:

  • Gestionar el estrés: cualquier actividad que nos ayude a relajarnos y reducir nuestro nivel de estrés contribuye a la regulación de la tensión ocular. Reservar tiempo para el ocio y realizar alguna actividad relajante como el yoga o la meditación son algunas de las opciones más populares.
  • Llevar una dieta saludable y equilibrada:</strong< una de las principales causas de estrés es el sobrepeso, que perjudica nuestro sistema cardiovascular y por ello aumenta nuestra tensión ocular. Limitar el consumo de grasas saturadas, bebemos agua y optamos por una dieta variada puede ayudarnos a combatir la hipertensión ocular.
  • Reducir el uso de las pantallas: El uso excesivo de dispositivos digitales contribuye a aumentar la tensión en los ojos y puede derivar en otros problemas como la vista cansada. Por ello, es importante establecer pausas para que nuestros ojos descansen.
  • Hacer ejercicios visuales: Ejercicios como masajear los ojos, fijar la vista en un punto y parpadear de forma voluntaria previenen la fatiga visual, lo que a su vez contribuye a reducir la tensión ocular.

Ponte en manos de un especialista en oftalmología

Es posible que, a pesar de realizar los ejercicios anteriores, los niveles de tensión ocular se mantengan elevados. En ese caso, puede que la hipertensión ocular se deba a alguna otra causa. Incluso si tiene su origen en el estrés, también puede suceder que nos encontremos ante un problema más grave o que necesite de un tratamiento por parte de profesionales.

En cualquier caso, es importante no autodiagnosticarse y acudir a un oftalmólogo para que nos proporcione el diagnóstico adecuado y sugiera la forma más eficaz de tratar nuestro problema. Recuerda que la póliza de asistencia sanitaria de Occident incluye un amplio cuadro médico en el que puedes encontrar especialistas oftalmológicos con los que pedir una consulta y revisar tus ojos. Así mismo, con este seguro dispones también de una atención y asesoramiento telefónico si necesitas aclarar alguna duda antes de enfocar la consulta con el especialista.

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