Las fugas en el radiador son una avería bastante frecuente en el hogar. Aunque hayamos comprado un radiador nuevo o de alta gama y hayamos seguido los pasos correctos para su instalación, es posible que al cabo de un tiempo veamos que el electrodoméstico gotea.
Junto con la reparación de averías en la caldera de gas, el mantenimiento del radiador es fundamental para disfrutar de la calefacción en casa y ahorrar energía. Por ese motivo, en este post te indicamos cómo tapar la fuga de un radiador paso a paso.
¿Por qué un radiador pierde agua?
La falta de uso es uno de los principales motivos detrás del deterioro del radiador y otros aparatos de calefacción. Es posible que, después de pasar todo el verano sin usarlo se haya estropeado. Aunque este desgaste puede provocar que no se caliente lo suficiente, otro de los problemas más visibles y frecuentes es que el radiador pierda agua.
En ese caso, hay dos motivos principales por los que el radiador gotea. Uno de ellos es de fácil solución: si el radiador pierde agua porque una tuerca se ha soltado, sólo hace falta apretarla con una llave inglesa.
Sin embargo, en la mayor parte de los casos, los radiadores que pierden agua gotean por la presencia de grietas en la superficie del aparato a causa de la presión derivada del uso. También es frecuente la aparición de fugas en zonas que han perdido estanqueidad, lo que hace que el radiador pierda agua por la llave de entrada. A continuación veremos cómo solucionar este problema.
¿Cómo reparar un radiador/calefacción que gotea?
Aunque la ayuda de un profesional siempre es recomendable, tapar una fuga en un radiador que gotea es relativamente sencillo. Basta con seguir los pasos que te indicamos:
- Localizar la fuga: Normalmente, las fugas de agua del radiador se encuentran en las juntas y llaves de paso, que se han deteriorado. Es importante localizarlas para saber dónde actuar.
- Desconectar el radiador: Cuando sabemos dónde está la fuga, debemos asegurarnos de que no corremos peligro desconectando la caldera y cerrando la llave. El circuito debe estar vacío antes de intentar cualquier tipo de reparación.
- Limpiar: Para deshacerte de todas las partes deterioradas de la zona afectada, límpiala y aplica una lija sobre su superficie. Así será más fácil tapar la fuga.
- Coger masilla: Compra masilla reparadora para tapar la fuga en un radiador. Es recomendable que sea de secado rápido, y que aguante temperaturas altas para garantizar que no vuelve a generarse la misma fuga.
- Masillar: aplica la masilla reparadora sobre la superficie donde está la fuga. Es importante que esté bien aglutinada y que aprietes fuerte para que se adhiera al máximo a la superficie del electrodoméstico.
- Secar: Deja que la masilla se seque durante el tiempo indicado por el fabricante. De este modo, estará lo bastante dura para asegurar que no se produce otra fuga.
- Lijar: Es recomendable que apliques una lija en la zona cubierta por la masilla para crear una superficie lisa y homogénea.
- Aplicar esmalte: Si quieres asegurar del todo el área afectada por la fuga, utiliza un esmalte que tenga resistencia al calor.
- Abrir la llave de paso: Ya lo tienes todo listo para poner en marcha el radiador. Es aconsejable purgar el electrodoméstico para garantizar un funcionamiento óptimo.
Cuenta con un profesional del bricolaje
Hay otras formas de tapar la fuga de un radiador utilizando herramientas especializadas como un soplete. Sin embargo, no es recomendable a no ser que seas un experto en bricolaje o cuentes con un técnico en reparaciones que te ayude a solucionar las averías de tu hogar.
En ese sentido, un profesional en reparaciones del hogar puede ayudarte a escoger la solución más adecuada a todos los problemas en tu vivienda, además el Ministerio de Fomento dispone de varias ayudas para la reforma de tu hogar. Recuerda que el seguro de hogar multirriesgo de Occident pone a tu disposición a un experto en bricolaje que te ayudará en la puesta a punto de tu hogar.
