La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce el síndrome de Asperger como una patología que se caracteriza por la dificultad para interactuar con otras personas. Efectivamente, su peculiar comportamiento y sus escasas habilidades comunicativas les dificultan hacer vida social.
El síndrome de Asperger tiene similitudes con el autismo, ambos son un trastorno que afecta a nivel social. Sin embargo, las personas afectadas por Asperger no presentan retrasos en la adquisición del lenguaje y tienen un coeficiente intelectual igual o superior a las demás personas.
Si quieres saber qué es el síndrome de Asperger en profundidad, es fundamental que conozcas sus particularidades, pues, con frecuencia, sus limitaciones vienen acompañadas de habilidades sorprendentes que hacen de la persona que la padece alguien realmente extraordinario.
Manifestación del síndrome de Asperger, síntomas más llamativos
Cuando hablamos del síndrome de Asperger, los síntomas más característicos tienen que ver con una falta total de empatía. Algunas personas son incapaces de interpretar sus emociones o las de los demás. Asimismo, les cuesta mirar a los ojos, así como la comunicación no-verbal. Suelen hacer escasos movimientos, aunque repetitivos, y hablan con un tono de voz monótono. Si alguien hace una broma, les cuesta entenderla, así como las ironías.
Una sospecha de síndrome de Asperger en niños es que pueden aprender a hablar o a leer muy pronto, o demasiado tarde. Se relacionan mejor con adultos y les cuesta salir de la rutina, como cambiar de colegio. El tacto y los ruidos fuertes pueden resultar desagradables. Además, suelen tener dificultades para realizar actividades físicas.
Prestar atención a un número reducido de temas es una manifestación habitual del síndrome de Asperger en adultos. Incluso, pueden interesarse solo por uno en concreto y, con frecuencia, suele estar relacionado con videojuegos, tecnología, programas de televisión o estadísticas deportivas.
Algunas personas con síndrome de Asperger presentan características muy concretas: son muy observadores, perfeccionistas y metódicos hasta el extremo; tanto, que ello les puede suponer una dificultad a la hora de tomar decisiones, ya que constantemente perciben una falta de planificación.
Los “superpoderes” de las personas con síndrome de Asperger
Las personas con síndrome de Asperger cuentan con habilidades especiales que les hacen destacar frente al resto de las personas. Su alta racionalidad les hace ser formidables en juegos de lógica, como el ajedrez.
Te sorprenderá saber que famosos actores como Keanu Reeves o Daryl C. Hannah padecen síndrome de Asperger. Pues, lo cierto es que algunos toman conciencia de la necesidad de expresar emociones para relacionarse con el resto del mundo y adquieren la habilidad de mostrarlas sin sentirlas realmente, por lo que pueden llegar a ser grandes actores o actrices. Por otro lado, Woody Allen y Steven Spielberg son dos figuras que, teniendo síndrome de Asperger, también han triunfado en el mundo del cine, y por todo lo alto.
De entre las curiosidades de esta patología, se podrían destacar sus increíbles capacidades. Por ejemplo, si ven un cuadro, serán capaces de recodar detalles de las que otras personas ni siquiera se habían percatado. Su mente también es extraordinaria para la música, para los números o para memorizar textos completos como una ley. Gracias a estas capacidades, pueden llegar a ser grandes matemáticos, abogados, músicos, astrónomos, físicos o informáticos. Einstein, Darwin, Newton, Beethoven, Mozart, Adele y Bill Gates, entre muchos otros, son algunos buenos ejemplos.
Asimismo, las personas con síndrome de Asperger son los reyes de los chats, pues son especialmente buenos con el lenguaje escrito. Cuidan enormemente sus palabras y escribir no requiere lenguaje corporal. También hay grandes de la literatura con síndrome de Asperger como Lewis Carroll.
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