El uso de la bicicleta como medio de transporte se ha convertido en una de las opciones más populares de la actualidad. Cada día, muchas personas deciden ir en bici al trabajo porque es más económico y contribuye al cuidado del medio ambiente mucho más que otro tipo de vehículos y, además, aprovechan para ejercitarse antes de la jornada laboral.
Lo cierto es que en algunos países no solo es una forma saludable de moverse, sino que ir al trabajo en bici tiene beneficios económicos.
¿Qué países pagan por ir a trabajar en bici?, ¿España lo hace o lo piensa hacer?
Ir en bici al trabajo: ¿podrían llegar a pagarme?
Además de ser una forma ecológica para desplazarte, hay empresas que ofrecen incentivos a sus empleados por usar la bicicleta para ir al trabajo. Estos incentivos varían en función del país en el que están, aunque lo normal es recibir un pago adicional en la nómina o deducciones fiscales.
¿Por qué se ofrecen estos incentivos? Porque fomentar el uso de la bicicleta para el trabajo tiene muchos beneficios. En primer lugar, se reduce la densidad de tráfico y la congestión de las carreteras, lo que suele tener un efecto positivo en el medio ambiente. Además, quienes utilizan este medio de transporte tienen una mejor salud, con lo que también se beneficia tanto al trabajador como al propio sistema sanitario, es decir que gracias a esta iniciativa los empleados podrán trabajar sus hábitos hacia unos más saludables, reduciendo el riesgo a contraer enfermedades y consiguientes bajas laborales .
3 países en los que pagan por ir al trabajo en bicicleta
¿En qué países se paga por ir en bici al trabajo? Existen varias iniciativas para fomentar el uso de la bicicleta por parte de gobiernos o empresas privadas. Algunos de los que destacan por estas medidas son:
- Países Bajos. Considerado uno de los países más amigos de la bicicleta, el gobierno holandés tiene varias políticas que fomentan el uso de la bicicleta como medio de transporte. Se pagan 21 céntimos por kilómetro libres de impuestos, que se abonan mediante la nómina. Es decir, que ir a trabajar en bici 10 km de ida y vuelta desde casa supone ingresar más de 2 euros diarios, unos 45€ al mes, tan solo con ese número de desplazamientos.
- Francia. El gobierno francés también incentiva ir en bici al trabajo, al igual que a quienes usan otros medios de transporte que no contaminen como patinetes eléctricos, con hasta 800 euros anuales a los trabajadores de empresas que se adhieran al plan.
- Bélgica. En este país, ir en bici al trabajo supone un incentivo fiscal de 25 céntimos por cada kilómetro de distancia.
Otros países como Reino Unido, Alemania, Dinamarca e Italia, también tienen planes para fomentar el uso de la bicicleta como medio de transporte sostenible, con ciudades en las que ya han puesto en marcha programas piloto.
Cobrar por ir en bici al trabajo en España, todavía es solo una idea
Es España, la idea de pagar por usar la bicicleta para el trabajo aún es un boceto y aunque sí hay propuestas para que tenga beneficios fiscales, el proyecto no está ni siquiera en sus fases iniciales. No obstante, algunas empresas han puesto en marcha planes propios de incentivos para fomentar el uso de la bici.
Lo que sí hay en España es una obligación por parte de las empresas de más de 500 empleados para elaborar un plan que impulse el uso de medios de transporte que contaminen menos. Se incluye en la Ley de Movilidad Sostenible del Ministerio de Transportes, pero en ningún caso se plantea por el momento ofrecer algún tipo de pago a los empleados que decidan ir en bicicleta al trabajo.
Además, todavía queda mucho por hacer en cuanto a infraestructura y estímulos para fomentar el uso de la bici como medio de transporte en España. Muy pocas ciudades tienen carriles bici y algunas que los tienen presentan fallos en la seguridad o apenas recorren unos tramos.
Pese a todo, muchas personas tienen interés por la movilidad sostenible y la bicicleta se perfila como una de las alternativas más viables para realizar desplazamientos.
Cómo funciona el pago por ir en bicicleta al trabajo
En general, existen dos formas de remuneración por ir al trabajo en bicicleta: mediante descuentos fiscales o por bonificación mensual. En ambos casos se establece una cantidad fija por kilómetro, por lo que cuanto más se use la bicicleta, más dinero se puede obtener.
Como norma general, se establece una cantidad máxima a percibir. Por ejemplo, en Francia llega a los 800 euros al año, mientras que los planes de Italia limitan el pago a 25 euros al mes, lo que equivale a 600€ al año como tope.
Además, para poder optar a este pago hay que estar registrado como usuario del plan y cumplir una serie de requisitos establecidos en él. Todo ello varía en función del país o de la empresa que lo ofrece.
Usar la bicicleta para ir al trabajo: beneficios
Además de ser un método sostenible y económico, existen otros beneficios de usar la bicicleta como medio de transporte:
- Mejora la salud cardiovascular. Al pedalear, la frecuencia cardíaca aumenta y la circulación mejora, lo que reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
- Fortalece los músculos. Ir en bici es un buen ejercicio de resistencia que fortalece y tonifica el cuerpo en general. Los músculos que trabaja la bicicleta incluyen piernas, glúteos y abdominales, además de mejorar la coordinación y el equilibrio.
- Reduce el estrés. El ejercicio libera endorfinas, que ayudan a reducir el estrés y la ansiedad.
- Mejora la productividad. Ir en bicicleta al trabajo tiene un efecto beneficioso en el estado de ánimo y la concentración, lo que se traduce en una mayor productividad laboral.
- Ahorra dinero. Al ser un medio de transporte muy económico, ya que no se necesita combustible como gasolina ni un mantenimiento costoso, también tiene beneficios para el bolsillo.
Hay otros beneficios, como contribuir a reducir la huella de carbono y cuidar el medio ambiente.
Una movilidad más sostenible
Tras analizar los países que tienen incentivos para ir en bici al trabajo y los beneficios de usar este medio de transporte, es interesante destacar la importancia de usar medios de transporte que reduzcan la contaminación y fomenten un modelo de movilidad más saludable. Aunque en España no existen ayudas económicas para hacerlo, los beneficios que proporciona a la salud e incluso al bolsillo pueden ser suficientes para pasarse al pedaleo.
Pero además de esta evidencia, no podemos pasar por alto la seguridad para poder practicarla. Pues en los trayectos pueden ocurrir ciertas situaciones (desde una caída a un imprevisto en la circulación) que pueden afectarnos. Por ello, existen seguros de Movilidad personal como los de Occident, que cuentan con coberturas y garantías en los trayectos en bici que harán que te sientas siempre protegido.
