- La indemnización por accidente de coche se puede reclamar tanto por los daños personales que hayas sufrido como por los gastos que se deriven de la reparación de tu coche siniestrado.
- Después de la valoración de daños y los informes por parte de los especialistas, el abogado o asesor jurídico calcula el valor de la indemnización y lo reclama a la compañía de seguros del otro conductor.
- Es obligatorio por ley tener contratado un seguro de coche que cubra los accidentes a terceros, pero también es recomendable tener aseguradas las consecuencias que el siniestro pueda ocasionar
Según el último informe de la DGT, en 2019 hubo más de 100.000 accidentes de tráfico con víctimas en España. Ante la probabilidad de sufrir un accidente en carretera, es importante tomar precauciones. Sin embargo, también es necesario saber cómo actuar si nos encontramos en esa situación, y conocer los pasos necesarios para reclamar una indemnización por accidente de tráfico.
¿Has recibido una baja por accidente de tráfico y quieres reclamar la indemnización que te corresponde, pero no sabes dónde empezar? Desde Occident queremos ayudarte, y por eso hemos hecho esta pequeña guía que contiene todo lo que necesitas para hacer tu reclamación por accidente de tráfico y te indica cómo tu seguro de vida puede ayudarte a sufragar los gastos relativos a tu baja laboral.
¿Cómo solicitar la reclamación por accidente de tráfico?
Lo habitual, si has sufrido un accidente, es solucionar el incidente sin problemas entre los conductores implicados.
Lo primero que debes saber es que no importa lo grave que haya sido el accidente. Si has sido víctima de un descuido por parte de un conductor, tienes derecho a reclamar una compensación. La indemnización por accidente de coche se puede reclamar tanto por los daños personales que hayas sufrido como por los gastos que se deriven de la reparación de tu coche siniestrado. Para reclamar, deberás seguir los siguientes pasos.
Recoge pruebas
Si has sufrido un accidente, lo más importante es conservar la calma y comprobar que estás bien. Si tu salud te lo permite, debes conseguir pruebas cuanto antes para demostrar que el accidente no ha sido culpa tuya. El primer paso para hacerlo es, como sabrás, intercambiar los datos con el otro conductor. Toma nota de todos los datos que estén a tu alcance: el modelo de vehículo, la matrícula, su nombre completo y el resto de la información que figure en los papeles.
Aunque la mayoría de accidentes leves se solucionan sin problemas, es posible que el otro conductor se muestre en desacuerdo sobre lo sucedido o incluso obstaculice tu recogida de datos. En ese caso, no dudes en llamar a la policía para que los trámites puedan llevarse a cabo. No olvides tomar fotografías y grabar un vídeo en el que se vea con claridad todos los daños que ha sufrido tu vehículo. Si hay testigos y te lo permiten, también puedes solicitarles que te cuenten lo que han visto.
Acude a un hospital cercano o de confianza
Si has podido realizar el anterior paso, puede que pienses que estás bien. Sin embargo, ten en cuenta que es posible que hayas sufrido alguna lesión interna y todavía no seas consciente. Por ello, es fundamental que vayas a un hospital para someterte a un reconocimiento médico.
Este paso no sólo es importante para prevenir problemas de salud que puedan aparecer con posterioridad. También tiene efectos de cara a la indemnización: si no has visitado a un médico en las 72 horas posteriores al accidente, no tendrás derecho a reclamar una indemnización por accidente de tráfico por latigazo cervical o cualquier otra clase de lesión.
Notifica el accidente a tu aseguradora
La notificación del siniestro a tu compañía de seguros también tiene un límite temporal: deberás informar del siniestro en el plazo máximo de una semana. En función de tu póliza de seguros, podrás contar con el asesoramiento jurídico de un abogado y tratamiento médico para la rehabilitación. En cualquier caso, siempre tienes la opción de contratar esos servicios por tu cuenta, aunque serán más caros.
Valoración de los daños
Si dejas la reclamación de la indemnización en sus manos, tu compañía de seguros se pondrá en contacto con la aseguradora del otro conductor. A través de la intervención de peritos especializados, determinarán los daños de cada uno de los vehículos. De forma similar, los médicos de cada uno de los dos conductores examinarán las lesiones que hayáis sufrido y harán la valoración correspondiente.
Acuerdo de indemnización o demanda civil
Después de la valoración de daños y los informes por parte de los especialistas, el abogado o asesor jurídico calcula el valor de la indemnización y lo reclama a la compañía de seguros del otro conductor. A continuación tiene lugar la negociación: si las dos compañías se ponen de acuerdo en una solución que satisfaga a ambas partes, en unos días podrás cobrar la indemnización por accidente de coche.
No obstante, también es posible que no se llegue a un acuerdo. Si estás seguro de que el causante ha sido el otro conductor, tienes la opción de interponer una demanda civil para que un juez determine la compensación que te corresponde. Naturalmente, el procedimiento judicial puede llevar mucho más tiempo y no recibirás la indemnización hasta que haya terminado. Además, si perdieras el juicio, deberías abonar las costas judiciales.
Tipos de baja/indemnizaciones de accidentes de tráfico
El cálculo de las indemnizaciones por atropello o por accidente de tráfico se basan en tres conceptos: el perjuicio personal básico, el perjuicio personal particular y el perjuicio patrimonial. El último de ellos se refiere al daño económico que ha supuesto el accidente para la víctima. Los dos primeros se refieren, respectivamente, a la baja médica en general y a la “pérdida de calidad de vida” temporal derivada del siniestro (por ejemplo, la hospitalización o los impedimentos físicos para realizar una actividad).
El valor del perjuicio personal se calcula en función del informe médico, y atiende también a tres ideas: el fallecimiento de la víctima, las secuelas o lesiones permanentes y, por último, las lesiones temporales. Para calcular la indemnización se utiliza un “baremo de tráfico” en el que se actualiza la cantidad según el aumento de las pensiones.
La indemnización de lesiones temporales se calcula en función del tiempo que ha durado la incapacidad temporal. En el caso de haber sufrido una lesión permanente, es necesario prestar atención al tipo de incapacidad que generan, que puede ser de varios grados:
- Incapacidad absoluta: Este grado incluye los problemas funcionales o anatómicos que hacen necesaria la asistencia externa para vestirse o comer, entre otros.
- Incapacidad permanente o gran invalidez: Se aplica este grado cuando la víctima está incapacitada para trabajar.
- Incapacidad total: Este grado inhabilita a la víctima para desempeñar las funciones de su profesión habitual.
- Incapacidad parcial: Este grado es aplicable cuando la víctima aún puede ejercer su profesión habitual pero su rendimiento se ha reducido en un 33% como mínimo.
Cómo cubre el seguro de vida la indemnización por accidente de tráfico
Como sabrás, solo es obligatorio por ley tener contratado un seguro de coche que cubra los accidentes a terceros, pero no por eso deja de ser muy recomendable y casi imprescindible tener asegurados, no solo los daños de tu propio vehículo, sino otro tipo de consecuencias que el siniestro pueda generar. Incluso, yendo un paso más allá, en ocasiones puede ser adecuado tener un seguro complementario, como un seguros de vida y accidentes, que te dé cobertura en los accidentes más graves o complicados.
Por ejemplo, el seguro de vida de Occident incluye una serie de coberturas que te cubren en caso de invalidez permanente y absoluta, pudiendo asegurar también el doble del capital en caso de fallecimiento o invalidez por cualquier tipo de accidente. Si has sufrido un accidente de circulación, el seguro de Occident te permite asegurar hasta el triple de la cantidad.