El ahorro doméstico es una de las cosas que más preocupan en cualquier familia. Sobre todo en lo relacionado con ahorrar energía, ya que cada vez tenemos más aparatos eléctricos en casa. Por eso, cada vez más personas quieren saber cómo ahorrar energía.
En este post vamos a echar un vistazo a algunas ideas para ahorrar luz y energía, además de unos cuantos inventos que te permitirán controlar y reducir el consumo en tu vivienda.
Cómo ahorrar energía
Para potenciar el ahorro de energía, lo primero que necesitas es acabar con el llamado “consumo fantasma”. Es decir, todos aquellos dispositivos que están gastando luz, aunque estén apagados, como el stand-by del televisor o los periféricos conectados a este.
Para evitar este consumo, lo mejor es enchufar los aparatos en regletas que se puedan desconectar o cuenten con un interruptor de encendido. Así, cuando no los estés utilizando estarás evitando un consumo innecesario
También es importante saber cuándo y dónde se consume más energía y estudiar la posibilidad de un ahorro de luz.
Cuándo consumimos más energía
Según sean tus hábitos, el consumo de energía será mayor en determinados horarios. Por ejemplo, no es lo mismo trabajar en casa que hacerlo fuera, como tampoco es igual tener una mayor actividad nocturna que irse temprano a la cama.
Si trabajas en casa y pones la calefacción o el aire acondicionado, serán esas horas en las que consumes más energía. De hecho, la calefacción es la fuente principal de consumo eléctrico en los hogares, seguida del resto de electrodomésticos.
En cuanto a la zona de la casa en la que más consumo existe, esta es sin duda la cocina. La nevera debe estar siempre encendida, como es lógico, y si a eso le unes una placa eléctrica, el horno o la campana extractora, el ahorro de luz en este espacio solo puede ser posible adquiriendo electrodomésticos eficientes.
Si además de ahorrar en electricidad quieres obtener un ahorro en tu seguro de hogar, contrata las coberturas que te hagan falta y paga solo por lo que necesitas. Así podrás reducir un poco el precio de tu póliza, sin renunciar a estar cubierto.
Hay algunas coberturas que pueden ser prescindibles. Por ejemplo, si cuentas con un servicio de asistencia técnica y reparación para tus electrodomésticos y aparatos eléctricos aparte del seguro, no necesitas contratarlo. Tampoco tienes por qué pagar la cobertura de daños estéticos si no te importa la calidad o el color de la pintura con la que se haga una reparación en caso de siniestro.
También es importante escoger el tipo de seguro adecuado según sea la vivienda, ya que hay varias opciones en función del grado de protección que necesites. Puedes tener una vivienda secundaria para ir de vacaciones, alquilarla o contar con una vivienda desocupada. Es probable que en estos casos tengas dudas acerca de cuál es el seguro que se ajusta a tus necesidades. Lo mejor es que consultes con tu asesor para que te ayude a decidir qué tipo de seguro necesitas, y pagar el precio justo por él.
Occident es uno de los ejemplos de aseguradoras que te permiten personalizar tu seguro de hogar, y también ahorrar en él.
Ideas para ahorrar energía
Una vez que sabes dónde y cuándo consumes más energía, puedes encontrar maneras de ahorrar en el consumo eléctrico. Por ejemplo, puedes poner la lavadora cuando el precio de la luz es más barato (suele ser de madrugada, pero si te levantas pronto tal vez sea una buena medida). También es importante llevar la ropa adecuada en casa, y así no tener que encender la calefacción o el aire acondicionado de manera innecesaria.
Además, hay una serie de gadgets que te pueden ayudar si buscas cómo ahorrar energía eléctrica:
Termostatos
Con un termostato puedes mantener la temperatura en niveles óptimos y reducir bastante el consumo de energía. Lo mejor es elegir un modelo digital, más preciso que los termostatos analógicos. Es un poco más caro, pero el ahorro de energía que consigues te permite amortizarlo en poco tiempo.
Bombillas LED
Si todavía no las tienes, estás consumiendo electricidad de manera innecesaria. Las bombillas LED tienen un consumo muy reducido, hasta un 90 % menos que las bombillas convencionales, y a diferencia de las antiguas bombillas de bajo consumo no tienen que calentarse para alcanzar el máximo de luz. Hay modelos para todo tipo de sistemas de iluminación, por lo que puedes tener toda tu casa iluminada con un consumo mínimo.
Enchufes
En el mercado existen enchufes programables que incluso puedes controlar desde el móvil. Con estos puedes apagar todos los aparatos eléctricos que no tienen por qué funcionar a determinadas horas, como puede ser un termo eléctrico de noche. Incluso protegen tus dispositivos de daños eléctricos.
Tarifas eléctricas, otra manera de ahorrar
Otra forma de ahorrar luz es contratar una tarifa de discriminación horaria en tu compañía energética, según sean las franjas en las que tienes un mayor consumo. O calcular la potencia que necesitas de verdad y ver si es posible bajar la que tienes en tu contrato.
Con una buena planificación, pautas y unos cuantos gadgets, el ahorro de energía será significativo.