Consejos para cuidar y recuperar el parquet de casa

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¿Cómo cuidar y mantener el parquet?

 

El parquet es uno de los suelos más habituales en los hogares españoles, por su estética y por la calidez que aporta al ambiente de cualquier estancia. De todos modos, mantenerlo en perfectas condiciones es muchas veces un reto difícil de conseguir.

Un piso de parquet es especialmente delicado de limpiar y conservar, por lo que es importante que tengamos en cuenta unos consejos básicos, que nos ayudarán a que podamos lucirlo perfecto por mucho tiempo.

 

La limpieza

Limpiar un piso de parquet no tiene nada que ver con un suelo de cerámica. Para empezar, debemos olvidarnos de la escoba y  de la aspiradora y sustituirlos por una mopa para pisos de madera, que nos ayudará a eliminar la suciedad sin causar arañazos. Impregnada con una solución de agua y vinagre al 20% nos ayudará a que la superficie quede impecable, sin usar productos abrasivos que dañen la madera.

 

Los principales enemigos del parquet

La humedad y los rayos del sol son dos factores que pueden dañar de manera importante un  suelo de parquet. Por eso, es importante que sepamos protegerlo adecuadamente.

La luz solar se come el barniz de la madera y puede hacer que vaya perdiendo color. Por eso, es importante que coloquemos protecciones en las ventanas que maticen la entrada directa del sol. Cortinas, estores y láminas protectoras nos ayudarán a que el parquet no se queme.

En cuanto a la humedad, debemos tener en cuenta que el agua es el peor enemigo del parquet. Por lo tanto, debemos secar cualquier líquido derramado enseguida. Si no podemos evitar que se cuele entre las láminas de madera, aplicar calor con un secador sin acercarlo demasiado a la madera puede ayudar a evitar que se hinche la madera.

 

Cómo recuperar el parquet

Si el parquet se ha hinchado por culpa de un exceso de humedad sólo podemos cambiar las láminas afectadas para conseguir que el suelo tenga el aspecto adecuado. Si no es así, podemos recuperar un parquet dañado puliéndolo y aplicándole dos capas de barniz, que después volveremos a pulir. De esta manera, parecerá nuevo otra vez.

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