La psicología de la inversión para resistir en el mercado
Una inversión inteligente puede reportarnos grandes ganancias para invertir, para financiar proyectos, para completar nuestros ahorros o para volver a invertir. Sea el objetivo que sea, lo cierto es que cada vez más personas están interesadas en sacar un mejor rendimiento de sus ahorros; pero se encuentran con miedos y frenos que les impiden entrar en el mercado inversor. Para solucionar estos problemas, podemos contar con la psicología de la inversión.
La preparación psicológica, fundamental para nuevos inversores
Una persona que entra por primera vez en el mercado de inversiones necesita tener muy clara la necesidad de respetar unas normas, que le ayudarán a evitar errores financieros importantes. También recurrir a un asesor profesional y prepararse mentalmente para aceptar las subidas y bajadas típicas de estas inversiones les ayudará a saber hacer frente a la inestabilidad propia de la inversión en fondos y acciones. No es de extrañar que el coaching para inversores sea una especialidad cada vez más demandada.
La necesidad de una mente positiva para inversores consolidados
Cuando un inversor ya tiene algo de experiencia y se siente preparado para ir más allá a través del trading, es la hora de que se plantee algunos cambios en sus esquemas mentales como inversor, que le ayuden en sus nuevas operaciones. Este es el punto en el que pasamos de trabajar para asentar unas bases a asumir nuevos retos.
Hay que tener en cuenta que los mercados inversores son muy volubles, y que pueden proporcionarnos grandes beneficios rápidos, pero también pérdidas. Aplicar la psicología a estas inversiones nos ayudará a evitar caer en la frustración cuando las cosas no van del todo bien o a dejarnos arrastrar sin pensar cuando todo va viento en popa. No olvides que mantener cierto equilibrio también es necesario en la inversión. Y, por supuesto, a entender una situación financiera con rapidez mental y control, sabiendo aplicar la experiencia anterior a las vivencias actuales.
De esta manera, podemos decir que nos estaremos aplicando una autoayuda psicológica positiva, que nos ayudará a superar los obstáculos del mercado, y a saber reaccionar ante cualquier situación que pueda poner en peligro nuestra inversión. Buscar una buena solución para acabar con un problema pasa siempre por afrontarlo con una actitud positiva y de aprendizaje para el futuro.
Una de las mejores prácticas que podemos llevar a cabo es adquirir conocimientos suficientes para saber entender por dónde vienen las tendencias y hacer que funcionen en nuestro beneficio. Y es posible que nos equivoquemos más de una vez, pero esto no tiene que influirnos negativamente. Debemos aprender a ver cada uno de los errores que hemos cometido en una oportunidad para aprender a invertir mejor.