En el contexto actual, marcado por el cambio climático y la subida de los precios de la gasolina, cada vez más usuarios se plantean adquirir un coche eléctrico. Sin embargo, muchos conductores todavía tienen dudas sobre aspectos como el mantenimiento y los riesgos de las baterías de los coches eléctricos.
Afortunadamente, la seguridad es una de las prioridades de los fabricantes de coches eléctricos, aunque ello no impide que puedan producirse situaciones peligrosas en caso de uso extremo. En este artículo te explicamos si son peligrosas las baterías de coche eléctrico, y cómo actuar en caso de accidente.
¿Son peligrosas las baterías de coche eléctrico en caso de accidente?
Todo apunta a que en los próximos años el sector automovilístico será testigo de un aumento en la demanda de coches eléctricos. Por ello, también cabe esperar que se fabriquen cada vez más baterías de ion litio, las más empleadas actualmente en esta clase de vehículos.
Sin embargo, por el momento existen una serie de circunstancias en las que las baterías de litio muestran algunos riesgos, aunque éstos sean muy remotos. El más común asociado a ellas es la denominada “fuga térmica”, que puede llegar a provocar la explosión de la batería del coche eléctrico, pero no llevemos a la alarma, pues esta situación tiene una probabilidad exigua a que se produzca.
La fuga térmica se produce cuando la batería se sobrecalienta, provocando una reacción en cadena por la cual se acaban quemando todas las células térmicas de la batería. La causa de este fenómeno suele hallarse en la misma batería, y puede consistir en un fallo en la fabricación, en algún componente dañado o en la presencia de polvo que obstruya la batería.
Normalmente, los golpes pequeños no son capaces de provocar un incendio o explosión, pero hay que tener en cuenta que la reacción puede producirse al cabo de hasta 3 días. Por ese motivo, es importante que tomemos precauciones y esperemos un tiempo prudencial si la sobrecarga de la batería ha generado algún tipo de reacción sospechosa.
Baterías de litio: peligros que hay que tener en cuenta
Además del problema de las fugas térmicas en caso de sobreesfuerzo de la batería, las baterías de litio también tienen otros riesgos y peligros (aunque sean de probabilidad mínima) que deben tenerse en cuenta. La mayoría de ellos se relacionan con la potencial aparición de gases, y la presencia de líquidos que contribuyen al funcionamiento de la batería, pero pueden suponer un riesgo en caso de golpe, filtración o incendio:
Mencionar que, al contrario que la batería de un coche de gasolina, las baterías de litio no emiten gas al funcionar. Sin embargo, en caso de sobrecarga, descarga o cortocircuito de las celdas eléctricas podrían producirse gases tóxicos. A pesar de ello, es muy poco probable puesto que la propia batería suele estar colocada en la zona más resguardada del vehículo.
De forma análoga, también es poco probable que se produzca la explosión de la batería. El diseño de la misma trata de impedirlo mediante la presencia de una vía de ventilación que permite expulsar el gas evitando el estallido de la batería. Lo mismo sucede con cada celda individual, que está diseñada para evacuar el gas sin provocar una reacción en cadena.
Para este tipo de baterías, es común el uso de gases y líquidos altamente corrosivos, y es por esta razón por lo que hay que tener precauciones. De hecho, el líquido que utilizan tiene forma de gel para impedir que rocíe el resto del vehículo en caso de accidente. En cuanto a los gases, y como ya hemos mencionado, su expulsión no suele conllevar riesgos por el lugar donde está ubicada la batería.
¿Qué hacer en caso de explosión de la batería de un coche eléctrico?
Teniendo en cuenta todo lo anterior, las baterías de los coches eléctricos pueden considerarse relativamente seguras. En cualquier caso, los riesgos en caso de forzarla pueden reducirse tomando medidas como guardar el coche en un lugar seguro y contactar con un técnico en caso de funcionamiento sospechoso.
Si hemos forzado la batería y llega a producirse un incendio o explosión, es importante conservar la calma. Afortunadamente, las baterías de ion de litio pueden apagarse con agua, pero puede ser muy arriesgado tratar de extinguir el incendio por nuestra cuenta. En caso de explosión, sin duda lo más seguro es ponerse en contacto con el servicio de emergencia para que acudan los bomberos.
Protégete ante accidentes
A pesar de los posibles riesgos de las baterías eléctricas, los accidentes graves sólo se producen en situaciones muy extremas en las que el coche ya era defectuoso o se ha forzado por encima de las capacidades para las que está diseñado. Las baterías están diseñadas para evitar accidentes en la medida de lo posible, y cabe esperar que los modelos futuros resuelvan cualquier problema actual.
Sin embargo, ello no significa que debamos despreocuparnos e ignorar las advertencias. Cualquier vehículo, ya sea eléctrico o no, puede tener algún fallo en la batería al arrancarlo, por lo que es importante estar cubierto. En ese sentido, recuerda que los seguros de coche de Occident se adaptan a cualquier perfil de conductor y ofrecen asistencia en carretera desde el kilómetro 0.