Ayudar a tu hijo con los deberes es fácil con unas reglas básicas
Si tu hijo está cursando enseñanza primaria, seguro que ya ha empezado a traer los primeros deberes a casa. Estas actividades son importantes tanto para ayudar a los niños a asumir los conocimientos adquiridos en la escuela, como para que empiecen a practicar las técnicas de estudio que deberán usar durante toda su formación. Saber cómo puedes ayudar a tu hijo con los deberes resultará clave para que asuma las tareas lo mejor posible.
Ten en cuenta que el papel de los padres es fundamental para que los niños entiendan que deben dar prioridad a los deberes, y para que se acostumbren a tener unos buenos hábitos de estudio.
Crear un ambiente de trabajo
Puedes ayudar a tu hijo a hacer los deberes creando una zona específica para que trabaje. Debe ser un sitio iluminado, cómodo y con todo el material que pueda necesitar a su disposición. Lo ideal es colocar la mesa de estudio cerca de una ventana luminosa y de la calefacción.
Además, es imprescindible que sea un sitio tranquilo, en el que el niño no se distraiga ni con los miembros de la familia, ni viendo la tele, ni jugando a videojuegos. Es importante que relacione este espacio como el lugar de trabajo, que le ayudará a concentrarse y a centrarse en las tareas que está haciendo.
El hábito de organización
Como padre o madre, también puedes ayudar a que tu hijo organice sus ratos de deberes de manera estratégica. Es decir, que hagan su rutina dando prioridad a las tareas más difíciles. Enseñarle algo tan sencillo como usar un calendario a la hora de planificar sus deberes establecerá las bases de su trabajo futuro.
También es muy importante que se fije un horario para hacer los deberes; por ejemplo, todos los días justo después de comer. De esta forma, si termina pronto siempre tendrá tiempo libre para poder jugar y crearemos en él el hábito natural de sentarse siempre a la misma hora para hacer los deberes.
Ser un buen ejemplo
De todos modos, la mayor ayuda que puedes prestar a tu hijo al hacer deberes es ser un buen ejemplo para él. Déjale claro que puede recurrir a ti cuando lo necesite y permanece cerca mientras hace deberes, pero demuéstrales que tú también haces tus tareas, como leer o trabajar en el ordenador. Así, verá que aprender es algo positivo que a los adultos nos gusta hacer toda la vida.
Algunos trucos interesantes
Asegúrate de que tu hijo come o merienda bien antes de empezar a hacer sus deberes, sea la hora que sea. Además, procura que no coma nada dulce, porque el azúcar le dará un subidón de energía que luego perderá de golpe.
Finalmente, ten en cuenta que el descanso es esencial para que un niño pueda rendir de manera adecuada. Si tu hijo está en los primeros años de primaria le sentará muy bien hacer una pequeña siesta de 30 minutos antes de trabajar, pero nunca más larga. También es importante que le enseñes a hacer pequeños descansos de 10 minutos cada cierto tiempo, para que pueda estar más concentrado.