Llegar a tus últimos meses de embarazo en época de verano se hace muy duro por culpa del agotador calor que hace que aún te canses más. Te damos unos sencillos consejos para llevarlo mejor.
Previene el golpe de calor
¿Sabías que tu temperatura es más alta ahora que estás embrazada? Si a esto le sumas el clima de este verano, te da como resultado que tienes que cuidarte aún más que el resto de la población ante los llamados “golpes de calor” ya que estarás más propensa a sufrirlos. Procura no exponerte directamente al sol. Usa gorras, sombreros, abanico y ponte siempre que puedas al cobijo de una buena sombra.
La hidratación: básica siempre pero más en los embarazos y en verano
La posibilidad de sufrir deshidratación, taquicardias o incluso un fallo circulatorio es mucho más alto en un embarazo en verano que en invierno. Pero no te alarmes la solución es de lo más fácil: ¡bebe mucho! Agua a todas horas y ¡asunto resuelto! Se aconseja que tomes un mínimo de 3 litros de agua diariamente.
Toma baños refrescantes
Si tienes posibilidad de darte un baño en el mar o en la piscina, ¡no te lo pierdas!
Puedes bañarte las veces que quieras y el rato que te apetezca salvo que hayas expulsado el tapón mucoso o roto aguas. Sólo en estos dos casos no puedes bañarte ya que el tapón mucoso protege el cuello del útero y el momento de romper aguas vaticina un parto muy cercano.
De todas maneras, pregunta su parecer a tu ginecólogo. Él estará a tu lado en todo momento y no será Occident quien te haga cambiar de médico. Gracias a Cosalud asistencia sanitaria podrás conservar (pertenezcan o no al cuadro médico) tus dos médicos insustituibles: tu ginecólogo y el pediatra de tus hijos.
¡Ten cuidado con el sol!
Como todos sabemos nuestro cuerpo no produce por si sólo la vitamina D. Necesitamos tomar el sol para que esta gran aliada de nuestros huesos se sintetice correctamente aportando el calcio tan necesario en el embarazo.
Pero a la vez, exponerte al sol puede incrementar la temperatura de tu organismo y hacer aparecer en tu piel esas antiestéticas manchas que suelen afectar a cara, areola mamaria y muslos dado que el nivel de pigmentación durante la gestación incrementa.
Sal a pasear a primeras y últimas horas del día elige la media sombra para sentarte a reposar.
Actúa contra el hinchazón de pies y piernas
Uno de los más claros síntomas derivados del calor del verano y el embarazo es el hinchazón de la parte inferior de tu cuerpo. Piernas y pies suelen hincharse, sobre todo a partir de la tarde. Procura tener los pies en alto, calzarte zapatos abiertos, ligeros y cómodos y huye de utilizar ropa ajustada que dificulta la circulación o telas sintéticas que impiden la transpiración.
Sigue una dieta refrescante y saludable
Por último debemos hacer referencia a la alimentación ya que ésta te ayudará a llevar mejor el calor durante tu embarazo en estos meses de verano. Como resulta lógico, procura comer alimentos ligeros y refrescantes.
Una buena elección son las sopas frías de verduras, los gazpachos, las ensaladas y la fruta fresca. Las carnes y pescados te recomendamos tomarlos bien asados o a la parrilla para evitar el exceso de grasa.
Elige siempre alimentos que te proporcionen el máximo de hidratación posible. Nuestro truco: acuérdate de los lácteos, suponen una opción muy sabrosa mezclados con fruta y ¡bien frescos!