Enfrentarnos a la muerte de un ser querido es una de las situaciones más duras que podemos experimentar en nuestra vida. El momento del velatorio es extremadamente delicado, ahí nos damos cuenta de que la esencia de la persona se ha ido para siempre.
Sin embargo, los profesionales funerarios, que se encargan de preparar el velatorio, nos pueden hacer la despedida un poco más llevadera.
Efectivamente, la tanatopraxia y la tanatoestética son prácticas enfocadas en conseguir la mejor presentación de una persona fallecida para que tenga el aspecto más natural y sereno posible cuando llegue el momento de recibir el último adiós por parte de sus familiares y amigos; pero cada una tiene sus especificidades y sus técnicas. ¡Las explicamos!
Qué es la tanatoestética
Cuando una persona fallece, la preparación del cadáver para el velatorio es considerada como una de las gestiones y trámites por fallecimiento esenciales. Y, la tanatoestética es una práctica muy concreta dentro de dicha preparación que se encarga del maquillaje de los difuntos. La tanatoestética es, en realidad, una especialidad de la tanatopraxia que se focaliza en el tratamiento estético del fallecido, dotándole del aspecto que facilite la despedida a sus familiares.
La función principal de la tanatoestética
El arreglo de los cadáveres tiene una importancia que va más allá de lo puramente estético, ya que los profesionales en tanatoestética realizan una labor capaz de reducir el impacto emocional que puede recibir una persona al ver los signos evidentes del cuerpo sin vida de un ser querido.
La tanatoestética incluye técnicas de maquillaje y peinado para difuntos que proporcionan al cadáver una imagen que se acerca al de la persona en vida, en la medida de lo posible. Hoy en día, se trata de un servicio ofrecido por la gran mayoría de empresas funerarias, aunque lleva aplicándose desde las civilizaciones egipcias, pasando por las griegas y las romanas.
Qué es la tanatopraxia
La palabra tanatopraxia hace referencia a la mitología griega, donde se rendía culto a Tánato, dios de la muerte no violenta; y engloba al conjunto de técnicas de adecuación y conservación del cuerpo de una persona fallecida.
¿Para qué sirve la tanatopraxia?
Una vez que una persona fallece, el cuerpo humano pasa de forma natural por diferentes fases, como son la autolisis, la tanatoquimia y la putrefacción.
La tanatopraxia es una actividad que engloba procesos de higienización, embalsamamiento, restauración y cuidado estético. Estas prácticas se realizan para conseguir objetivos distintos:
- Gracias a la tanatopraxia podemos eliminar las distintas bacterias que se puedan contagiar o que provocan una descomposición más rápida de la habitual.
- Además, conseguimos minimizar los efectos visibles de los organismos que mueren más rápidamente en un cuerpo sin vida.
- Los tanatopractores utilizan químicas, solubles y acuosas para mantener con un aspecto natural las partes superficiales y conservar las internas. Este trabajo se lleva a cabo siempre cuidando al extremo las normas de sanidad e higiene, así como de confidencialidad. Un tanatopractor nunca dará a conocer las muestras visibles de enfermedad, cicatrices, tatuajes o cualquier otro tipo de marca corporal del difunto.
Cuál es la diferencia entre ambas
La diferencia fundamental entre la tanatopraxia y la tanatoestética es que la primera engloba un tratamiento del cadáver más general, mientras que la tanatoestética es un trabajo de maquillar muertos, sobre todo, acompañado de labores de peinado. Por lo demás, encontramos fuertes similitudes entre ellas:
La tanatopraxia y la tanatoestética, que han formado parte de los ritos funerarios de diversas culturas y religiones, se adecuan a los diferentes ritos y creencias y se caracterizan por un completo respeto al difunto, y por extensión, a su familia y sus allegados.
El objetivo de ambas es minimizar el impacto psicológico que puede tener ver a un ser querido una vez que ha fallecido, tal como adelantábamos cuando hablábamos de la tanatoestética ya que juega un papel especialmente importante en este sentido, sobre todo si la causa de la muerte ha sido un accidente que ha afectado notablemente el cuerpo de la persona fallecida.
Cuál es el coste de cada práctica
Es difícil establecer cuál sería el precio concreto de un servicio de tanatopraxia o tanatoestética en exclusiva, ya que suelen estar incluidos en el paquete necesario que ofrece la funeraria para la celebración del velatorio. No obstante, podemos hacer estimaciones.
- En primer lugar, debes tener en cuenta que solo el velatorio te puede costar entre 1000 y 2000 euros, dependiendo de múltiples factores como por ejemplo, la localidad donde tenga lugar.
- Por otro lado, es interesante fijarse en el salario de los profesionales en tantopraxia y tanatoestética. Cada uno de ellos puede llegar a cobrar entre 1.700 y 2000 euros al mes.
Pero, ¿cuál podría ser el valor del servicio si quisiéramos abonarlo de manera independiente?
- Si a un servicio de velatorio intermedio (1500 €), le restamos el precio medio de algunos servicios como las flores (75 €), el ataúd (700 €), las esquelas (75 €) y la noche del velatorio (600 €), obtenemos como resultado unos 50€, por lo que el precio aproximado de los servicios de tanatopraxia y tanatoestestética pueden rondar los 50 € de media.
- Por otro lado, podemos responder a esta pregunta a partir del tiempo que se tarda en preparar a un difunto para el velatorio. Habitualmente, las labores de tanatopraxia incluyendo la tanatoestética suelen durar alrededor de una hora, aunque dependiendo del estado del cuerpo, el tiempo podría prolongarse hasta 3-4 horas de duración. Teniendo en cuenta lo que cobra un profesional, podríamos establecer que solo el trabajo podría llegar a tener un valor aproximado de 13 euros por hora, a lo que habría que sumarle el precio de los materiales y productos utilizados, lo que podría resultar cerca de los 50 € por el servicio.
En resumen, podemos establecer que el valor de los servicios de tanatopraxia y tanatoestética en conjunto puede equivaler a un importe de entre 50 y 100 € de media, dependiendo del tiempo que duren las labores.
Aún así, estos servicios normalmente están incluidos en el servicio funerario básico que se contrata o dentro del precio del seguro de decesos y sus coberturas si lo tenemos contratado.
Conclusiones
La tanatoestética y la tanatopraxia son labores de preparación de los cadáveres que consisten en condicionar al difunto para el momento del velatorio. El objetivo principal de estas prácticas es reducir el impacto psicológico que la imagen del difunto pueda provocar en los seres queridos que van a despedirse de él de manera definitiva.
Los productos y las técnicas que se usan en ambos casos sirven para dotar al cuerpo de una imagen similar a la que tenía en vida, en la medida de lo posible, una tarea especialmente importante en las personas que han fallecido a causa de un accidente. La tanatopraxia se encarga de la preparación del cadáver de una forma más general, mientras que la tanatoestética incluye las tareas de maquillaje y peinado del difunto exclusivamente. Ambas son labores que se desarrollan desde la antigüedad y que hoy en día se ofrecen junto con el resto de servicios funerarios y cuya labor podemos estimar entre 50 y 100 euros, dependiendo de su duración.