La actividad de un taller mecánico requiere mucho movimiento y una constante interacción con diversas personas: proveedores, empleados y clientes. El riesgo de imprevistos siempre está latente en cualquier negocio, pero en este caso, un error puede suponer daños de un valor especialmente cuantioso, debido a los productos y materiales que se manejan. Por esta razón, contar con un seguro para un taller mecánico resulta imprescindible.
Las garantías primordiales ante un accidente en un taller mecánico
Cuando se trata de un accidente en un taller mecánico existen riesgos específicos. Por ello, es importantísimo disponer de un buen seguro para pymes, como el que ofrece Occident; una opción que puede protegerte de múltiples incidencias. Por ejemplo, contar con una garantía que cubra averías de maquinaria es realmente beneficiosa para un taller, pues estas están sometidas a un uso constante. Esta cobertura no solo respalda el negocio ante averías de maquinaria específica, sino también los equipos informáticos y las cámaras frigoríficas.
Cortocircuitos
Por ejemplo, un cortocircuito puede llegar a provocar consecuencias fatales en un taller, afectando a más de un equipo al mismo tiempo. Ahora bien, si se dispone de un seguro adecuado, gracias a la cobertura por daños eléctricos en cualquier instalación, todos estos desperfectos podrán solventarse: desde la recepción a la distribución de energía eléctrica. No importa la causa, ya sea por corrientes anormales, cortocircuitos, la propia combustión o causas inherentes a su funcionamiento, el problema podrá resolverse.
Derrame de sustancias líquidas
En los talleres se almacenan todo tipo de líquidos: aceites, combustibles, anticongelantes y otros fluidos imprescindibles de gran valor. Sin embargo, también es frecuente derramarlos, ocasionando grandes pérdidas. Por ello, un buen seguro debe cubrir las pérdidas del líquido almacenado, producidas por un derrame derivado de un daño accidental, sufrido en los depósitos o instalaciones.
Daños por parte de terceros
Además, en el caso de sufrir cualquier otro daño por parte de terceros, siempre podrás contar con la tranquilidad de la defensa jurídica en la póliza de tu seguro; por ejemplo, cuando un proveedor estropea la mercancía al descargar.
¿Y si el taller ocasiona daños a otras personas?
Trabajar en un taller seguro, con el conocimiento de que, pase lo que pase, estarás cubierto ante posibles perjuicios a terceros, ofrece tranquilidad y mayor libertad durante la jornada laboral. La cobertura de Responsabilidad Civil (RC) que debe incluirse en un seguro para un taller mecánico incluye particularidades que garantizan la indemnización correspondiente en determinados daños, especialmente, para aquellos más frecuentes. Entre otras coberturas se incluye la de RC por contaminación accidental, de manera que, si se origina cualquier tipo de vertido de sustancias nocivas para aguas o terrenos colindantes, el seguro se hace cargo de los daños en cuestión.
Por ejemplo, durante la reparación de un vehículo, un empleado puede cometer un error o negligencia sin querer. Sin embargo, estos errores se suelen percibir tras la finalización del trabajo, cuando el coche ya ha sido entregado al cliente. Por ello, un buen seguro para pymes deberá incluir una cobertura de RC post trabajos, para poder enfrentarse a estas situaciones. Además, aquellos daños producidos fuera del recinto de la empresa, también pueden ser respaldados mediante un tipo de RC específica.
Por supuesto, como en cualquier negocio que tenga trabajadores a su cargo, el seguro para un taller incluye la cobertura de RC patronal, la cual cubre las indemnizaciones correspondientes en caso de accidente durante la actividad laboral.
¿Tienes alguna cuestión sobre situaciones concretas que se pueden dar en tu taller? Contacta ahora con un mediador de Occident para resolver todas tus dudas e inicia el proceso de contratación de tu póliza. Él te guiará de manera personalizada desde el principio.
