¿Miedo a tomar decisiones? Podrías sufrir aboulomanía

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Aboulomania o miedo a tomar decisiones

En especial cuando se trata de decisiones difíciles o importantes para el futuro, es natural que nos paralice el temor a equivocarnos. Sin embargo, cuando la incapacidad para tomar decisiones nos paraliza en el día a día y dificulta nuestra vida, puede tratarse de un problema psicológico importante.

La dificultad patológica en la toma de decisiones en psicología se conoce como aboulomanía, y puede llegar a afectarnos lo bastante como para ser motivo de baja por depresión o ansiedad. En este artículo te explicamos qué es la aboulomanía y te damos técnicas para reducir la ansiedad al tomar decisiones.

Tomar una decisión ¿cómo hacerlo?

A lo largo del día nos enfrentamos a muchos tipos de decisiones: desde la elección de los platos de un menú hasta decisiones con consecuencias de gran calado como encontrar un nuevo empleo o casarse. Es evidente que invertimos mucha energía en tomar decisiones, algo que puede llegar a abrumarnos.

Aunque pueda parecer obvio, es importante dejar espacio para meditar acerca de nuestras prioridades, y estar serenos y seguros a la hora de enfrentarnos a cualquier dilema; de lo contrario, nos arriesgamos a padecer un problema derivado de esta incapacidad para tomar decisiones.

Incapacidad para tomar decisiones, ¿qué me pasa?

Esta incapacidad crónica para tomar decisiones puede provenir de los resultados de malas decisiones previas o de algún otro desorden psicológico como la ansiedad o la depresión. Pasar una mala época y sentir que perdemos el control de nuestra vida puede llevarnos a estresarnos incluso más, por lo que es importante autoanalizarse antes de que el problema vaya a más.

Además de la aboulomanía, de la que hablaremos a continuación, la inseguridad a la hora de tomar decisiones también puede derivar en otros problemas psicológicos. Por ejemplo, la abulia también provoca una falta de motivación por culpa de la cual se pierde el deseo de tomar decisiones; asimismo, otros desórdenes como el trastorno pasivo agresivo también pueden ser el resultado del estado de ánimo negativo provocado por la dependencia emocional y la inseguridad en la toma de decisiones.

Aboulomanía, ¿sabes qué es?

Por su parte, la aboulomanía es un trastorno en el que la dificultad para tomar decisiones se transforma en una obsesión: la persona afectada por desorden mental no sólo se muestra indecisa, sino que rumia constantemente acerca de todas las opciones entre las que escoger y se obsesiona por la imposibilidad de encontrar la decisión correcta.

La aboulomanía se relaciona muy estrechamente con otros problemas como el estrés, la ansiedad y la depresión. Además, obstaculiza gravemente las interacciones sociales, por lo que si no se trata puede llegar incluso a inducir al suicidio. En ese sentido, es importante distinguirla de la inseguridad: afecta incluso a la toma de decisiones insignificantes como qué comer, qué corte de pelo escoger o qué película ir a ver al cine.

Para distinguirla de otras patologías, vale la pena tener en cuenta sus principales síntomas:

  • Pensamientos intrusivos y obsesivos
  • Exceso de preocupación por decisiones intrascendentes
  • Perspectiva negativa sobre el futuro al que lleve la toma de decisiones
  • Negativa a asumir responsabilidades
  • Dependencia emocional y pasividad en la toma de decisiones
  • Miedo a la crítica y al rechazo
  • Ansiedad
  • Inseguridad y baja autoestima

Miedo a tomar decisiones: 4 Técnicas para conseguir tomar decisiones con más seguridad

Como cualquier otro trastorno, la aboulomanía requiere de tratamiento psicológico y de asesoramiento por parte de un experto. Si te cuesta tomar decisiones hasta un punto obsesivo, lo más recomendable es ponerse en contacto con un terapeuta profesional.

Sin embargo, existe una serie de técnicas y actitudes que todo el mundo puede adoptar para enfrentarse a la toma de decisiones en el día a día. Cualquiera que padezca indecisión de vez en cuando puede beneficiarse de los siguientes consejos y técnicas.

Rechaza el perfeccionismo

La inseguridad y el perfeccionismo están estrechamente relacionados. Con mucha frecuencia, la cantidad de opciones igualmente buenas que brinda la sociedad moderna puede paralizarnos y hacernos sentir que no hemos escogido la mejor de todas. Por ello, es importante recordar que la perfección es imposible, y que cualquier opción que escojamos puede ser válida aunque no sea óptima.

En ese sentido, también es importante dejar hueco a las decisiones incorrectas. No en vano se dice que de los errores se aprende, por lo que aceptar que tal vez nos equivocaremos puede relajarnos a la hora de tomar decisiones.

Limita las opciones deliberadamente

De forma similar a lo anterior, la variedad de oferta y el sobreestímulo del mundo digital hace que perdamos tiempo revisando todas las posibilidades antes de decidir. Por ello, puede ser recomendable limitar nuestras opciones deliberadamente, ya sea siguiendo una dieta concreta o escogiendo las prendas de ropa que más nos gustan y deshaciéndonos de las demás.

Delega

Aunque delegar de forma persistente puede ser un signo de abulia o aboulomanía, es importante mantener a raya la cantidad de decisiones que tomamos. Eso quiere decir que debemos escoger qué decisiones es importante tomar por nuestra cuenta y cuáles podemos delegar a los demás. Dejar que sea un amigo quien escoja el plan o la película que ir a ver puede liberarnos de la sobrecarga de decisiones que afecta a nuestra vida diaria.

Asigna un momento del día para la preocupación

Si nuestra indecisión nos lleva a un estado de ansiedad, es aconsejable reservar un momento del día para preocuparnos. Muchos tratamientos insisten en crear esta “ventana para la preocupación”, un espacio de 30 minutos en el que desahogarnos y preocuparnos abiertamente. Así, el resto del día pospondremos nuestra angustia porque sabemos que no es el momento de hacerlo.

Consulta con un psicólogo

Las anteriores técnicas pueden servirnos si la indecisión nos afecta de forma esporádica, pero es importante recordar que no son un sustituto de la terapia profesional. Si nuestra dificultad al tomar decisiones nos provoca malestar y ansiedad, es importante acudir a un profesional cuanto antes.

Un psicólogo especializado puede brindarnos tratamientos y ofrecernos técnicas de relajación para enfrentarnos al estrés de la rutina diaria y ayudarnos a tomar decisiones de forma más serena. En ese sentido, recuerda que el servicio Bienestar y Salud de Occident pone a tu disposición a profesionales de la psicología para resolver cualquier problema que afecte a tu vida.

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