Muchos de los nuevos modelos de vehículos incorporan pantallas táctiles inspiradas en la revolución de los smartphones. Contar con pantalla táctil en el coche supone una oferta muy atractiva por su aspecto moderno; además, no pueden negarse las ventajas de disponer de una interfaz desde la que controlar funciones como la climatización, el audio y otros aspectos del coche.
Sin embargo, usar la pantalla táctil del coche también plantea serios riesgos para la seguridad en la conducción. De hecho, los peligros de esta clase de coches pueden ser mayores que la comodidad que ofrecen. Para ayudarte a prevenir accidentes en carretera, en este artículo te indicamos por qué las pantallas táctiles del coche no son tan buena idea, y te damos consejos para velar por tu seguridad en carretera.
¿Por qué es una mala idea usar pantallas táctiles en el coche?
Si los nuevos vehículos se inspiran en las interfaces de los móviles de última generación, también heredan de ellos unos riesgos similares. Hay que tener en cuenta que la normativa establece multas por conducir con el móvil por los peligros que derivan de su uso. De una forma similar, prestar atención a la pantalla táctil suele constituir una fuente importante de distracciones al volante.
No es de extrañar, y pocos se sorprenderán de que los coches con salpicadero analógico generen menos distracciones. La posición fija de los elementos y el uso de elementos mecánicos sencillos como los diales o los interruptores hace que debamos prestar menos atención a su funcionamiento. En cambio, la pantalla táctil integra muchas funciones y requiere más interacción para acceder a la que necesitamos, contribuyendo a confundirnos y distraernos.
Y no sólo eso: el parecido con las aplicaciones móviles puede hacer que asociemos la conducción con el ocio y nos olvidemos de la importancia de la seguridad. Un ejemplo claro es la intromisión constante de las notificaciones en dispositivos integrados con nuestro teléfono: recibir una notificación en el coche hace que desviemos nuestra atención instintivamente y aumenta el riesgo de sufrir un accidente.
Si hay una virtud que contribuye a reducir el riesgo de las pantallas táctiles en el coche, se trata sin duda del uso predominante de control por voz. La posibilidad de activar y desactivar funciones sin necesidad de soltar el volante ni mirar a la pantalla del coche supone una ventaja indudable. Sin embargo, ello no reduce los anteriores peligros, y no impide que podamos distraernos si nuestro dispositivo no funciona como queremos.
Consejos para la seguridad en la conducción
Si, a pesar de todos los riesgos , preferimos las funciones integradas que ofrece una pantalla táctil, es evidente que será incluso más importante extremar las precauciones. Tanto si contamos con un modelo con o sin pantalla táctil, vale la pena recordar los siguientes consejos para optimizar nuestra seguridad al volante:
- Respeta las señales de tráfico y el límite de velocidad: Las medidas de seguridad en carretera son lo primero a lo que debemos obedecer si queremos evitar problemas, tanto si se trata de evitar una multa como un accidente.
- Ponte el cinturón: Incluso cuando no se puede evitar un accidente, el cinturón es el mejor aliado para evitar lesiones graves o incluso letales.
- Evita el móvil: El 40% de accidentes se debe a una distracción al volante, y el móvil es una de las principales influencias. Ponlo en silencio y olvídate de él hasta que llegues a tu destino.
- Conduce a la defensiva: Es importante prepararse para cualquier tipo de distracción o reacción impulsiva por parte de otro conductor. Entre las medidas más importantes se encuentran mantener la distancia de seguridad y calcular como es debido el momento en el que rebasar o adelantar a otro vehículo.
- No conduzcas bajo la influencia de drogas ni medicamentos: El alcohol y las drogas son los peores enemigos de la conducción, pero también es importante que tengas en cuenta si has tomado algún medicamento que afecte a tu sistema nervioso.
Cuenta con un seguro en caso de accidente
Es evidente que la conducción siempre implica una serie de riesgos: los peligros en la carretera no siempre provienen de nosotros mismos, y a menudo es inevitable sufrir algún percance. En cualquier caso, lo mejor que podemos hacer es ser precavidos y prestar toda nuestra atención a la carretera, evitando las distracciones de cualquier clase.
Si, a pesar de ello, sufrimos algún incidente en carretera, lo más importante es contar con un seguro de coche adecuado que nos proporcione la cobertura y la protección necesaria. Recuerda que los seguros de coche de Occident son fácilmente adaptables a cualquier tipo de vehículo y conductor, y que su cobertura puede ampliarse con garantías adicionales como la asistencia en carretera desde el kilómetro 0.