Es natural que surjan dudas cuando decidimos tener un perro como animal de compañía. Tanto si es un cachorro o lo hemos adoptado con varios años de edad, no sólo es imprescindible aprender a cuidarlo, sino también a comunicarse con él. Por suerte, tener unas nociones básicas de lenguaje canino nos puede ayudar a entender qué nos quiere decir nuestra nueva mascota y a educarle en patrones de conducta adecuados.
Por supuesto, no todos los perros son iguales, y por eso es fundamental comprender cuáles son las señales de calma de nuestra mascota y averiguar qué está detrás de sus problemas de conducta. En este post hablaremos del lenguaje corporal de los perros y te daremos unos cuantos consejos para establecer una mejor comunicación canina con tu pequeño amigo.
Lenguaje corporal en perros: cómo identificar las señales de calma
Si tienes un perro, no te extrañará saber que son animales muy comunicativos, y tienen muchas maneras de transmitir sus emociones, concretamente con un lenguaje canino muy claro. Es recomendable saber cuáles confirman que nuestra mascota se encuentra bien y cuáles indican que nos está pidiendo algo de calma y tranquilidad. Algunas de las principales señales de calma en perros son:
- Bostezar: Aunque bostezan al despertarse, los perros también pueden indicar que están tranquilos o te están prestando atención cuando acompañan el bostezo tirando las orejas hacia atrás, mirando de reojo o girando la cabeza.
- Relamerse: El relamido, especialmente con la cabeza gacha o ladeada, suele indicar que nuestra mascota quiere tomarse un descanso o tener algo más de espacio.
- Lamer: Por lo general esta acción indica que el perro nos tiene afecto. Sin embargo, si notamos que lo hace de forma nerviosa, puede ser que esté intentando liberar estrés y que tal vez estamos haciendo algo que no le gusta.
- Girar la cabeza: Los giros de cabeza suelen indicar que el perro está incómodo y quiere más espacio. También puede acompañarlo de jadeos o relamidos.
- Empujarnos con el hocico: Más incluso que lamer, este gesto es una expresión de afecto y búsqueda de atención por parte de nuestra mascota. Puede ir acompañado de ojos entrecerrados, otra muy buena señal de que no está alerta sino muy relajado con nosotros.
- Olfatear el suelo: Los perros realizan esta acción antes de conocer a otro perro como muestra de calma y respeto. Es indicio de que tu mascota está bien educada. Es similar a caminar en círculos, una forma de saludo cordial.
- Quedarse quieto: Si nuestro perro se queda quieto frente a otros animales, está indicando que respeta su espacio y no busca pelea. Sin embargo, cuando nos lo hace a nosotros después de una discusión, puede indicar que se siente indefenso y tiene miedo.
- Estirarse en el suelo: Puede indicar que el perro busca jugar con nosotros o, si se relame y gira la cabeza, que quiere que lo dejemos en paz.
- Mostrar la barriga: Es una señal de calma y sumisión, indicando que el perro confía en nosotros.
En general, las anteriores señales indican que el perro está tranquilo o quiere estarlo, por lo que debemos interpretarlas de forma positiva. Al contrario, es necesario prestar atención a las señales que indican que el perro está nervioso, como las sacudidas o los movimientos compulsivos.
Cómo debemos comunicarnos con nuestro perro
Después de las anteriores claves para conocer el comportamiento canino, es esencial que tengas en cuenta ciertos hábitos que debes adoptar para comunicarte con tu mascota. Presta atención a los siguientes consejos:
- Contacto visual, voz aguda y volumen bajo: siempre que hables con tu perro, mírale a los ojos. Adopta un tono distinto al que usarías para regañarle para que no se confunda, y ten en cuenta la sensibilidad de su oído.
- Asocia gestos con palabras: Si lo haces, el perro siempre entenderá lo que le quieres decir.
- Refuerzo positivo: El perro comprende mejor la lección si evitamos el castigo. En su lugar, prémiale cuando haga algo bien.
- Respeto: Muéstrale el mismo respeto a tu perro que tú le exiges a él. En especial, sé cariñoso si da señales de estar incómodo o correrás el riesgo de estresarlo aún más.
Cuenta con un etólogo para mejorar tu relación con tu mascota
La información anterior es fruto de la investigación de los etólogos, o profesionales del comportamiento animal. La labor de los etólogos es averiguar las causas del comportamiento de animales salvajes y domésticos, y descubrir así la forma más eficiente de comunicarse con ellos.
Si detectas que tu mascota tiene algún problema de conducta o te cuesta comunicarte con ella, te recomendamos que lo lleves a un etólogo para que te ayude y averigüe las causas de vuestras dificultades. Con el servicio de orientación médico telefónica de seguros de hogar como el de Occident, puedes resolver las consultas que tengas relacionadas en este sentido y con el cuidado de tu mascota. Te puede ser de gran ayuda, orientarte, incluso proporcionarte información de interés y contacto, si finalmente decides acudir a un etólogo.
Comunícate con cariño y respeto
Lo más importante para comunicarnos con nuestra mascota es mostrarnos pacientes y afectuosos con ella. Igual que buscamos comprender a nuestro perro a través de sus gestos, es fundamental que nosotros adoptemos una forma de comunicación clara que él pueda entender.
Por supuesto, hay casos algo más complicados, y es posible que los problemas de conducta de tu perro causen daños en tu hogar. Para ello, lo mejor es contar con una cobertura para mascotas que incluya la responsabilidad civil por los daños ocasionados. Además, tu póliza puede brindarte la ayuda profesional necesaria para que tanto tú como tu perro aprendáis a comunicaros de forma respetuosa y eficaz.