La dieta de la felicidad, la clave natural para sentirte bien
¿Sabías que hacer dieta puede hacerte sentir feliz? Aplicar unos consejos saludables a tu alimentación mejorará tu estado de ánimo y te activará para llevar a cabo tus actividades diarias. Te explicamos las bases de la dieta de la felicidad.
Los alimentos que mejoran el ánimo
La glucosa es esencial para que el cerebro funcione de manera adecuada, lo que influye directamente en tu estado de ánimo.
Incluir en la dieta hidratos de carbono de liberación lenta o integrales te permitirá tener la cantidad de glucosa necesaria para tu cerebro. De todos modos, no caigas nunca en la tentación de consumir golosinas, ya que el azúcar de absorción rápida solo hace que acabemos perdiendo vitalidad.
El pescado azul nos aporta Omega-3, un elemento nutricional con incidencia positiva en los casos de depresión. El pescado azul, la soja y las nueces son algunos alimentos con un alto contenido de estas grasas.
El triptófano es un tipo de aminoácido que se convierte en serotonina, el compuesto cerebral que nos ayuda a sentirnos mejor y más relajados. Nos lo proporcionan las aves, la carne roja, leche, huevos, cereales y pasta, así como el chocolate.
La dieta ideal para la felicidad
La dieta mediterránea contiene todos los elementos que podemos necesitar para mejorar nuestro estado de ánimo y evitar la depresión.
Además, algunos estudios señalan que el consumo de chocolate negro afecta positivamente a nuestras emociones. Un par de onzas de chocolate con un 70% de cacao o más es suficiente para que nuestro cuerpo olvide el estrés.
Alimentos para la relajación
¿Sabías que algunos alimentos pueden favorecer el mal humor? El exceso de grasas, de productos procesados y bebidas alcohólicas o excitantes favorece la irritabilidad. Además, el exceso de sal también es un estimulante que puede afectar el sistema nervioso central al disminuir el potasio del organismo.
También en muchas dietas se suprimen alimentos ricos en vitaminas y minerales, como la B12, la B6, el magnesio o el zinc, que son indispensables para mejorar nuestra función cerebral además de evitar la ansiedad y la irritabilidad.
